http://dx.doi.org/10.14482/zp.29.0008

Jorge Miguel Mizuno Haydar

JORGE MIGUEL MIZUNO HAYDAR

Profesor Emérito Universidad del Norte jmizzuno@uninorte.edu.co

Información bibliográfica

Compilador: Francisco Del Pozo Serrano, Doctor en Ciencias de la Educación (Programa Educación Social), Universidad de Granada (España).

Editorial: Universidad del Norte

Año de publicación: 2018

Número de páginas: 248

ISBN: 978-958-741-956-6

En una compilación del profesor Francisco José del Pozo Serrano, de la Universidad del Norte (Barranquilla.Colombia), se presenta esta obra sobre Pedagogía Social en Iberoamérica. El trabajo, aborda la Pedagogía Social, que ha sido un campo de conocimiento social y educativo en crecimiento a nivel mundial en las últimas décadas. Como disciplina educativa y social, ella se orienta la acción práctica sociocultural de los procesos complejos de los contextos sociales, teniendo como fin la socialización y la convivencia de las personas, los grupos y las comunidades; así como en la promoción de la autonomía y la autoorganización ciudadana para la promoción comunitaria y la justicia social.

Este libro conformado por dos grandes miradas (la iberoamericana en general y la colombiana en particular), ofrece la perspectiva de los fundamentos, algunos ámbitos y ciertos retos principales de la Pedagogía Social en la región iberoamericana, desde sus relaciones, encuentros y posibilidades de los territorios a partir de once capítulos.

El primer capítulo, de la mano del profesor Xavier Úcar Martínez de la Universidad Autónoma de Barcelona, presenta la pedagogía social en Europa y América Latina valorando los diálogos y las interacciones que, desde el marco de lo común, se vinculan a ambas tradiciones y corrientes sociopedagógicas, realizando un recorrido por diversos países de la región, planteando toda la complejidad que suponen las relaciones y las acciones para la acción social y educativa.

El segundo capítulo por el profesor José Antonio Caride Gómez, de la Universidad de Santiago de Compostela, hace referencia a la construcción teórico-práctica como pasado y futuro de la Pedagogía Social desde la corresponsabilidad comunitaria que cada actor tiene en la construcción de ciudadanía; y cómo desde el contexto español (institucional y académico) se ha ido fortaleciendo un campo social y educativo sumamente relevante para la investigación y la acción orientada a un futuro que está repleto de crisis e incertidumbre "glocal".

El capítulo tercero, por el profesor Érico Ribas Machado, se adentra en la educación popular latinoamericana y la pedagogía social europea, desde las relaciones en la construcción de una educación sociocultural, teniendo como base pedagógica, el gran legado de Paulo Freire y la contribución a la historia de la educación social y popular, como uno de los promotores de una educación política, social, ética y crítica y puente fundamental para la construcción de la Pedagogía Social desde los dos lados del Atlántico.

El capítulo cuarto, por el profesor Miguel Melendro Estefanía de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), ofrece una perspectiva de investigación-acción con uno de las poblaciones más vulnerables: la infancia, la adolescencia y la juventud en situación de dificultad (población en riesgo o amenaza social) o en conflicto social (situaciones como vulneración, violencia, delincuencia, negligencia, etc.), desarrollando desde propuestas basadas en evidencia, qué estrategias son más eficaces para la intervención socioeducativa y qué perspectivas son necesarias tener en cuentas para la acción.

El capítulo quinto por la profesora Ires Aparecida Falcade de la Universidad Federal de Paraná, propone un escenario de la educación social especializada (como ámbito, institución y situaciones de conflicto social) vinculada al ámbito de la delincuencia de las mujeres, y aporta algunos resultados de investigaciones realizadas en el sistema penitenciario y poniendo en evidencia la falta de articulación entre los diferentes sectores de la justicia criminal brasileña y el análisis respecto a la ineficacia del tratamiento penitenciario y de la reincorporación social de las personas privadas de libertad, que se agrava en el caso de las mujeres y de sus familias.

El capítulo sexto, trabajado por la profesora María Asunción Manzanares Moya, de la Universidad de Castilla de la Mancha, trata sobre la educación social en las instituciones educativas formales (en relación a las acciones y programas principalmente no curriculares): la mediación comunitaria entre familias, escuela y sociedad; la convivencia escolar, la promoción sociocultural, las actividades extraescolares, y otros aspectos de la necesaria incorporación profesional y formativa de agentes socioeducativos para el ámbito escolar.

El capítulo séptimo, por el profesor Francisco José del Pozo Serrano y Ana Zolá Pacochá, de la Universidad del Norte, abre el apartado con un abordaje de la pedagogía social y la educación social en Colombia desde la educación para la paz en un período de posconflicto, planteando aspectos teóricos, políticos, profesionales y socioeducativos vinculados a los campos de acción de la Pedagogía Social en Colombia desde sus retos. Se enfatiza para ello, en la necesidad de la profesionalización socioeducativa a partir de las licenciaturas del ámbito de la educación social (etnoeducación, educación popular, educación comunitaria, educación de adultos, educación rural y campesina, entre otras) que aporte, desde la educación social, a la construcción de una nueva cultura de paz.

El capítulo octavo, por la profesora Juana Bautista Borja González de la Universidad del Norte, enfatiza en el enfoque de prevención y de promoción en el ámbito comunitario desde la la educación para la salud, como un ámbito de la pedagogía social, que atiende principalmente a los determinantes generales y sociales que condicionan e intervienen en la salud y en la enfermedad tanto en el contexto internacional como en Colombia; así como los planteamientos que desde lo comunitario, se relacionan con y para la acción socioeducativa y el bienestar.

El capítulo noveno, por la profesora Teresita Bernal Romero, de la Universidad Santo Tomás de Bogotá, plantea la acción socioeducativa del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), desde la protección de la infancia y el restablecimiento de los derechos que vincule al infante y al adolescente con su entorno familiar y social, fortaleciendo la red vincular y la participación social.

El capítulo décimo, por la profesora Martha Lucía Izquierdo Barrera, de la Universidad tecnológica de Pereira, plantea el proceso sociopedagógico y la sistematización de experiencias asociada a la práctica social y educativa (con amplia tradición en Latinoamérica), como una de las herramientas más pertinentes para trabajar en complejos territorios donde la pluralidad multicultural y los abordajes desde la diversidad cultural y social, permiten un desarrollo socioeducativo que tenga en cuenta el enfoque diferencial y la construcción conjunta para la educación intercultural.

En el undécimo capítulo, los profesores Carmen Ricardo Barreto, y John Cano Barrios, de la Universidad del Norte, plantean cómo generar ambientes y procesos virtuales de aprendizaje sociocultural que favorezcan el desarrollo de la competencia intercultural en contextos multiculturales. Esta propuesta se concreta con actividades didácticas para ser aplicados en contextos educativos mediados por TIC.

La obra cierra con los "Principales Retos" que se presentan desde todo este recorrido en el camino que emprende cada día en los territorios iberoamericanos la Pedagogía Social (estudiada, actuada o investigada) a fin de poder intervenir educativamente en los escenarios y situaciones sociales de vulnerabilidad y vulneración de los Derechos Humanos; así como de promoción de los mismos.