versión On-line ISSN 1794-8886 |
Colombia y los Estados Unidos en los inicios de la Guerra Fría (1950-1966) "Raíces históricas del conflicto armado colombiano"
Colombia and The United States at the beginning of the Cold War" (1950-1966) "Historical roots of the Colombian armed conflict"
Luis Fernando Trejos Rosero1
1 Abogado de la Universidad Libre de Colombia. Candidato a Doctor en Estudios Americanos (IDEA/USACH), con apoyo de MECESUP. Profesor de la Universidad de Santiago de Chile y de la Universidad Central de Chile. Investigador CLACSO - ASDI. Luis.trejoro@usach.cl; luifer385@gmail.com.
Resumen
El presente trabajo se propone realizar un análisis de la relación bilateral de Colombia y los Estados Unidos durante los inicios de la guerra fría, para demostrar como dicha relación influyo directamente en las dinámicas (políticas, jurídicas y electorales) anticomunistas desatadas en Colombia entre 1950 y 1966, en las cuales tendría su origen el conflicto armado colombiano. En este contexto, se consolida el bipartidismo, la autonomía militar frente al control civil y anticomunismo se convierte en el centro de las políticas de seguridad, además se desarrollan los primeros grupos de autodefensas campesinas comunistas que darían origen a las FARC-EP, y se presentan los primeros quiebres dentro del Partido Comunista Colombiano, originados por la posición de este último, frente a la Revolución cubana y la lucha armada como vía de acceso al poder.
Palabras Claves: Comunismo, guerra fría, violencia, autodefensas, revolución cubana.
Abstract
This work analyzes the bilateral relation of Colombia and the United States at the beginnings of the cold war, in order to demonstrate how this relation made an directly influence in the anti-communist dynamics (political, legal and electoral)untied in Colombia between 1950 and 1966, in which would have its origin the Colombian armed conflict. Against this background, they are organized the first communist self-defense groups of farmers who would give rise to the FARC-EP, and in this way, it appears the first break within the Colombian Communist Party, originated by the position of this last one, against the Cuban Revolution and the armed warfare like the way to accede to the power.
Keywords: Communism, cold war, violence, self-defense, Cuban revolution.
Colombia y Estados Unidos, una relación de vieja data
En 1823, el Secretario de Estado de los Estados Unidos, John Quincy Adams, se refería a la potencialidad que los recursos colombianos bien organizados tendrían sobre el desarrollo del país, según Adams: "esos atributos harían que el país fuese llamado a ser en adelante una de las naciones más poderosas de la tierra" 2 El siglo XX, se inició con tensiones en las relaciones binacionales, debido a la secesión de Panamá en 1903, promovida activamente por los Estados Unidos.
Durante el gobierno del ex canciller conservador Marco Fidel Suárez (19181921), se desarrolló la Doctrina Suárez, que se materializo en el lema "réspice polum " (mirar hacia la estrella del norte), mirar hacia los Estados Unidos, porque: "El norte de nuestra política exterior debe estar allá, en esa poderosa nación, que más que ninguna otra ejerce atracción respecto de los pueblos de América" 3 Esta política, que buscaba el establecimiento de una relación bilateral profunda en temas políticos y comerciales, fue el marco en el que se ha desarrollado una dependencia histórica de Colombia a los Estados Unidos.
Fue tal la influencia del réspice polum, en las relaciones internacionales colombianas, que en 1959, el entonces Canciller, Julio Cesar Turbay Ayala, en un discurso frente a la Cámara de Representantes afirmaba:
He de decir aquí que el señor Suárez jugo un papel importantísimo en nuestras relaciones exteriores y levanto el nombre de Colombia hasta planos de extraordinaria altura y respetabilidad dentro del concierto de los pueblos cultos. Su teoría réspice polum (...) ha venido abriéndose campo en el continente (...) Cumplo, pues, con un deber de solidaridad y de admiración al insigne Canciller Suárez, al declarar que en mi concepto, su aporte al prestigio internacional de Colombiana sido uno de los más grandes.4
Ya desde 1929 Colombia y Estados Unidos, habían iniciado contactos como parte de la planificación de la defensa del canal de Panamá. En 1948 Colombia autorizo misiones de entrenamiento del ejército y la aviación de los Estados Unidos, en el marco del programa hemisférico de defensa. En febrero de 1949 se firmaba en Bogotá el Pacto de Asistencia y Asesoría Militar con los Estados Unidos para la provisión de equipo militar al Ejército y la Fuerza Aérea colombiana.5 Esta relación se mantendría y profundizaría en los años siguientes, llegando a convertirse el réspice polum, en los inicios de la guerra fría, en: "una visión ideológica del papel de Colombia en el mundo. Un férreo anticomunismo y una identificación sin matices con Estados Unidos".6
La violencia (1948-1953)
En el caso colombiano, la Violencia no se debe abordar como un "peak" abrupto de la criminalidad política ya que su aparición está ligada al histórico proceso de bipartidismo, que fue moldeando una mentalidad polarizada y que terminó siendo decisiva en la vida social y política del país.7 El siguiente texto ilustra mejor el origen del antagonismo bipartidista:
En Colombia se nace conservador o liberal por una especie de determinismo uterino. La filosofía de los partidos no juega papel alguno en la filiación política de sus adherentes de base. Se es liberal o conservador por tradición de familia o por motivaciones emocionales, no en virtud de una asimilación racional de principios. Pero los campesinos se matan entre sí porque unos son liberales y otros conservadores.8
En 1946 asume el poder Mariano Ospina Pérez, en representación del partido conservador, luego de 16 años de gobiernos liberales. Al interior del conservatismo, Laureano Gómez, uno de sus máximos dirigentes, se refería al liberalismo de la siguiente forma: "El liberalismo es el basilisco al que se debía eliminar de la faz de la república para que hubiera paz, cultura y progreso 9 Desde ese momento, se inicia una trágica etapa de la historia colombiana marcada por el uso extremo de la fuerza por parte del gobierno conservador en contra de los militantes liberales y comunistas. Con la intención de controlar social y políticamente la totalidad del territorio colombiano, el gobierno conservador despliega directamente una serie de acciones violentas que incluyen asesinatos, abaleos e instalación de bombas contra diarios, sedes políticas de la oposición en distintos municipios. Si bien en algunos lugares los liberales organizados enfrentaron armados la arremetida conservadora, la generalidad del período fueron las muertes y desplazamiento forzado de liberales. En este contexto, en algunas regiones, hacen su aparición los temidos Pájaros.10
En este sentido, el uso de la violencia es justificada desde los sectores conservadores, no con argumentos morales o filosóficos, sino porque es una forma eficiente de logar sus objetivos políticos. En este caso, la violencia se presenta como una manifestación de poder, ya que a través de su uso consciente y de los efectos de la misma, los conservadores buscaban provocar un cambio definitivo en el orden político colombiano.11
El pensamiento del Partido Conservador se puede sintetizar en las ideas de su entonces máximo dirigente Laureano Gómez, quien para ese momento se manifestaba de la siguiente manera:
Los problemas de occidente habían comenzado con la reforma protestante desde el día que Lutero había fijado sus tesis en la catedral de Wittemberg, dando así comienzo a la terminación de ese mundo armónico que era el medioevo, regido por un sólo poder espiritual bajo el papado. El desarrollo de los acontecimientos, todo dentro de una concepción conspirativa detrás de la cual estaban los judíos, llevó a la sociedad occidental a la Revolución Francesa, proclamadora del pernicioso dogma de la igualdad. El liberalismo sentó sus reales y su consecuencia fue la aparición del comunismo, hijo legitimo del protestantismo, el racionalismo, el liberalismo y la Revolución Francesa (...) detrás de todo ello tenían que estar las sociedades secretas, es decir la francmasoneria, producto claro del judaísmo.12
Para Gómez, el Partido Liberal, cumplía la diabólica tarea de destruir la verdadera religión y crear el caos en Colombia.13
En el año 1948 el partido liberal se encontraba aglutinado en torno a la figura del abogado y dirigente progresista Jorge Eliécer Gaitán14, quien con un discurso de amplio contenido social, había logrado movilizar a las mayorías liberales, teniendo como centro de su fuerza a los obreros y grupos urbanos, incluyendo a campesinos de los dos partidos; según Germán Guzmán, en torno a Gaitán se observó un esbozo de conciencia de clases.15 Si bien, el periodo de la violencia no se inicia con la muerte de Gaitán, el 9 de abril quedó grabado en la memoria de los colombianos como el momento de ruptura profunda en la historia reciente del país, no sólo porque Gaitán representaba las aspiraciones de cambio de muchos, sino por los efectos sociales y políticos que su asesinato produjo. El anuncio de su muerte desató una espontánea reacción nacional que desembocó en una anarquía generalizada, los hechos sucedidos en la capital fueron conocidos como "el Bogotázo" Fueron tales, los efectos sociales y políticos de la violencia desatada por la muerte de Gaitán, que Eric Hobsbawn, la describió como: "La mayor movilización armada de campesinos (ya sea como guerrilleros, bandoleros o grupos de autodefensa) en la historia contemporánea del hemisferio occidental, probablemente con la sola excepción de algunos momentos álgidos de la Revolución Mexicana" .16 Pero la violencia del 9 de abril y los días subsiguientes no logró transformar o corregir las relaciones sociales y de poder existentes en Colombia, salvo cuantiosos daños materiales y una gran cantidad de muertos, "en ningún momento el gobierno dejó de gobernar. En ningún momento se cuestionó la legitimidad del gobierno en Bogotá".17
Luego de acusaciones mutuas por la muerte de Gaitán, ambos partidos (liberal y conservador) encuentran una versión común, y señalan como causante del magnicidio a un enemigo externo de la Patria, el "comunismo internacional", sintonizándose con el discurso regional, promovido por la diplomacia de Estados Unidos.18
Para ese momento, elPartido Comunista Colombiano, atravesaba un proceso de cambios internos, definidos en su V Congreso, Celebrado en julio de 1947. Su entonces Secretario General, Gilberto Vieira White,19 los describía así:
En 1947 proclamamos la reconstrucción leninista del partido porque habíamos abandonado los principios de Lenin bajo la influencia revisionista y hasta llegamos a cambiar el nombre del partido. Entonces lo primero que hicimos fue volvernos a llamar Partido Comunista y luego adoptar los métodos organizativos leninistas que se habían abandonado.20
La consigna del PCC, fue la de conformar una oposición con todas las fuerzas anticonservadoras por medio de un Frente Democrático contra la reacción, complementando de este modo el Frente Antiimperialista que venía impulsando desde antes: "Política de masas, acción de masas, resistencia de masas y no aventuras" 21 En el plano electoral, el PCC apoyaba la candidatura presidencial de Gaitán, y una vez ocurrido su asesinato, en palabras de Gilberto Vieira, su reacción se dirigió a:
Provocar una huelga general que exigiera la renuncia del Presidente de la Republica. Nos dedicamos pues, a la huelga general, no a la insurrección. El levantamiento popular no estaba en nuestros planes. Tratamos de actuar en el cuando se presentó, pero no éramos una fuerza capaz de dirigirlo.22
La muerte de Jorge Eliécer Gaitán, tiene como telón de fondo la estructuración del sistema interamericano, que tenía como antecedentes inmediatos la Conferencia Interamericana celebrada en Chapultepec en marzo de 1945, en la que se habían sentado las bases de la unidad militar panamericana bajo tutela de los Estados Unidos. En 1947, se materializaba en Río de Janeiro, el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR). La IX Conferencia Panamericana, celebrada en abril de 1948 en Bogotá, había sido convocada para crear la Organización de Estados Americanos (OEA), institucionalizando regionalmente el panamericanismo liderado por los Estados Unidos.23
Este contexto, de alineamiento político incondicional con los Estados Unidos, facilito la versión promovida por las elites políticas colombianas, de que el asesinato de Gaitán, habría sido obra del comunismo. Llevando al gobierno del conservador Mariano Ospina Pérez, a romper relaciones diplomáticas con la Unión Soviética, el 13 de abril de 1948. En este sentido es importante reproducir el informe que el agregado naval de la Embajada de los Estados Unidos en Colombia, Coronel W. F. Hausman, quien en un escrito con fecha 24 de mayo de 1948, concluye lo siguiente:
Los acontecimientos del 9 de abril no fueron el resultado de un plan del Partido Comunista de Colombia; no se han producido pruebas de complicidad comunista foránea en el asesinato de Gaitán (...) El principal factor de motivación de los desórdenes fue el uso de la radio, especialmente en Bogotá, por elementos antigobiernistas (...) La teoría más consistente es que Roa ejecuto un plan diseñado por una pequeña conspiración de furibundos conservadores (...) todo el mundo salvo los gaitanistas furibundos, parecen sentirse contentos de que Gaitán se haya ido.24
El 20 de julio, se posesiona el Congreso con mayoría liberal, si bien la calma volvió a las grandes ciudades, en el campo la violencia continuó su línea ascendente, ahora con nuevosactores: las guerrillas y autodefensas liberales y comunistas, caracterizadas, estas últimas, por tener un objetivo político definido y una estructura militar más disciplinada. Posteriormente muchos de los líderes de las guerrillas liberales se convertirán en bandoleros25 y los movimientos campesinos armados de origen comunista, darían nacimiento a las FARC.26
Entre 1949 y 1950 se da un escalamiento sostenido en las acciones violentas cuando el gobierno conservador ante la posibilidad de perder las elecciones del año en curso, establece tres ejes de acción política: "a) Estabilización del grupo conservador en el poder. b) Exclusión del liberalismo por cualquier medio.c) Utilización de la policía en una empresa de persecución prospectada, auspiciada y promovida desde las altas esferas del gobierno27.
La respuesta del Partido Comunista, ante la violencia generalizada desatada por el gobierno conservador, fue la organización de autodefensas de masas28. Especialmente en las regiones campesinas en las que ejercía influencia, ya que desde su fundación, desarrolló una intensa actividad con el campesinado. Según Gilberto Vieira:
cuando se funda el Partido Comunista, el campesinado estaba constituido por verdaderos siervos feudales. Comenzamos por organizar la rebelión de los siervos para que no pagaran más arrendamiento en especies o en dinero a los terratenientes. Organizábamos huelgas de estos campesinos llamados arrendatarios y planteábamos la lucha por la tierra. Eso prendió extraordinariamente en muchas regiones campesinas (...) el campesinado se mostraba como una fuerza revolucionaria bastante más activa que la clase obrera.29
En el plano internacional, el gobierno de Ospina Pérez, profundizo sus vínculos con el Franquismo, llegando incluso a ir en contra de las recomendaciones de las Naciones Unidas. El 25 de febrero de 1950, el gobierno colombiano elevo la representación en España a la categoría de embajada. Era tal la admiración que despertaba la organización del Estado español en el pensamiento conservador colombiano, que un objetivo político de los gobiernos conservadores, fue reformar la Constitución, tomando como guía la española (franquista). La parte introductoria del proyecto de reforma constitucional, con fecha del 6 de mayo de 1953, contenía el siguiente texto:
Las instituciones de la república se apartan definitivamente de la influencia perniciosa de las ideas rosseaunianas y marxistas y se inspiran por entero en las evangélicas y bolivarianas, a fin de realizar la democracia cristiana (...) La educación pública volverá a ser organizada y dirigida en concordancia de los dogmas y la moral de la religión católica.30
En agosto de 1950, asume la presidencia el conservador Laureano Gómez Castro. El día 12 de diciembre la Revista Life, citada por Osorio (2003), reseño la victoria electoral de Gómez, de la siguiente manera:
La semana pasada el pueblo colombiano, amante de la libertad, perdió su preciosa herencia a través de un juego de poder infatigable del partido conservador minoritario. La principal característica de Gómez fue el reino del terror, los pueblos liberales fueron atacados. Durante los últimos meses cayeron asesinados 2000 liberales, cientos fueron encarcelados y otros huyeron de sus poblaciones. Solamente a Bogotá llegaron 7000. Las tropas tomaron posesión de la capital y patrullaron las calles31
En su discurso de posesión Gómez, movido por el pragmatismo32 sostenía que:
Los Estados Unidos están enviando la vanguardia de su juventud a una lucha sangrienta en defensa de esos principios, y mi espíritu no quedaría satisfecho si en estos momentos mis labios dejaran de pronunciar las palabras de admiración y reconocimiento por el heroico esfuerzo que se hace para salvar la civilización.33
Nuevamente el réspice polum, se convierte en guía de la política exterior colombiana, y en este caso, facilita una cercanía estratégica en el marco de la guerra fría. En señal de acercamiento real con los Estados Unidos, el gobierno de Laureano Gómez, compromete la participación de militares colombianos en la Guerra de Corea. Esta participación se inicia en 1950 cuando el presidente Laureano Gómez, ofreció enviar a costas coreanas la fragata Almirante Padilla, con fines de patrullaje. El 1 de noviembre zarpó desde Cartagena. Dos semanas después, Eduardo Zuleta Ángel, embajador de Colombia en Estados Unidos, ofreció los servicios de un Batallón de infantería de mil hombres y ochenta y tres oficiales. El Batallón Colombia prestó sus servicios de combate desde mayo de 1951 hasta julio de 1953.34
El envío de tropas a Corea, paso a ser un factor importante de negociación para el gobierno colombiano, especialmente para la adquisición de armas. El entonces Ministro de Guerra de Colombia, utilizaba como argumento central para que Estados Unidos le vendiera armas a Colombia, el gran esfuerzo y sacrificio que los militares colombianos estaban haciendo en Corea.35
El gobierno de Laureano Gómez, escalo y profundizo la persecución oficial en contra de la oposición política, agravando sustancialmente el deterioro social e institucional en grandes áreas del territorio nacional.
La Dictadura Militar de Gustavo Rojas Pinilla (1953-1957)
En 1953, ante el avance incontenible de la violencia en campos y ciudades, se produce un golpe de Estado, encabezado por el General Gustavo Rojas Pinilla. El golpe fue relativamente consentido por las elites, ya que todos los grupos políticos lo apoyaron, con excepción de los conservadores laureanistas y el Partido Comunista. La llegada de Rojas al poder se percibía como un arbitraje militar en la disputa bipartidista, y que sería definitivo en la resolución del problema de la violencia que afectaba a grandes zonas rurales. La creencia generalizada en los dirigentes políticos, era que la gestión de Rojas seria rápida, por lo cual la normalidad institucional retornaría pronto, cosa que no sucedió.36
El gobierno de Rojas, fue caracterizado por el historiador Carlos Restrepo Piedrahita, como una "especie castrense de gobierno conservador",37 descripción que se vio confirmada por la conformación del gabinete de gobierno, en el que participaron solo civiles conservadores y tres militares, que ocuparon los ministerios de agricultura, comunicaciones y guerra.
Es de destacar, que durante el gobierno de Rojas Pinilla, hubo una tendencia a mostrar cierta influencia del gobierno peronista. Estos comentarios se fundaron en hechos como la visita de María Eugenia Rojas (su hija), a la Argentina del General Perón en 1954. Un año antes (1 de agosto de 1953) el embajador de Colombia en Argentina, Abelardo Forero Benavides, escribía:
Una nación del sur, la Argentina, activa constantemente su política de relación con los pueblos hermanos. El General Perón no ha abandonado un solo instante este aspecto de su posición. Y no vemos la razón para pensar que Colombia tenga menos antecedentes de respetabilidad y menos elemento de prestigio, para seguir un programa que le haga crecer su influencia moral.38
Rojas Pinilla, empezó a destacarse como militar, en la represión de los disturbios del 9 abril de 1948 en la ciudad de Cali, y por haber comandado el Batallón de militares colombianos que combatió bajo órdenes de Estados Unidos en la guerra de Corea. El haber participado en la guerra de Corea marca un hito en la historia de las Fuerzas Militares colombianas, ya que no sólo se foguearon en un conflicto internacional, sino que asumieron el marco ideológico del enfrentamiento real de los dos sistemas imperantes, que luego fueron materializados en Colombia por medio de la Doctrina de la Seguridad Nacional y la utilización reiterada de conceptos como el de "enemigo interno"39. Una de las tareas centrales del nuevo gobierno sería buscar el desarme y desmovilización de todos los grupos armados, por medio de una amnistía general. En cierta forma, la superación de la guerra civil, como se señaló anteriormente, fue una de las causas por las cuales los sectores mayoritarios de las dirigencias políticas no se opusieron al arbitraje militar.40
A la propuesta de amnistía, las facciones armadas respondieron de distintas maneras. La mayoría de las autodefensas y guerrillas liberales accedieron a dejar las armas y con su desmovilización y posterior reinserción, se da una breve pausa al proceso de violencia iniciado por el Partido Conservador. El desarme liberal se da en gran medida porque la mayoría de sus jefes guerrilleros, eran hacendados (no latifundistas), con importantes posesiones de tierra, por lo cual no estaban interesados en las reivindicaciones sociales. Su lucha era fundamentalmente anti-conservadora, es decir, sus objetivos se circunscribían a tratar de expulsar a los conservadores del poder para que el liberalismo regresara a él.41 Ricardo Rojas, ex guerrillero liberal de los Llanos Orientales, sintetiza de la siguiente forma la posición liberal de ese momento:
El golpe era casi deseado, para que terminara la furia conservadora. Con el golpe los guerrilleros liberales pierden sus banderas y se entregan, hacen cola para entregar las armas. Eso se debe a que no tenían un objetivo político, porque para los jefes solo había un fin: ser jefes y ganarles a los conservadores.42
Pero a pesar de la amnistía ofrecida por el gobierno, las guerrillas y autodefensas de orientación comunista accedieron a desmovilizarse pero sin entregar las armas. Estos núcleos de campesinos comunistas fueron sometidos a una especie de aislamiento político y social, ya que al debilitamiento de Partido Comunista, producido por años de represión oficial, se sumaba su declaratoria de ilegalidad por parte de la dictadura, que ahora era apoyada por el Partido Liberal y por la abierta filosofía anticomunista de los mandos militares.43
En el marco de esta ofensiva política y militar de la dictadura contra el Partido Comunista, se presentan en 1955 los operativos militares contra un núcleo de campesinos comunistas, ubicado en el Municipio de Villarrica (Tolima). Según el teniente coronel Hernando Forero Gómez, el operativo se realizó para: "Combatir a los bandoleros comunistas que pretenden crear un fortín impenetrable a las puertas de Bogotá"44. Las acciones armadas se extendieron rápidamente a regiones vecinas, enfrentando a un contingente del Ejército compuesto por 5.000 soldados, contra una resistencia de 800 campesinos.45
Debido al alto nivel de politización del campesinado de la región y al avanzado nivel de organización social presente en la zona por medio de sindicatos de agricultores y diversos comités, el intento por aniquilar los núcleos comunistas hace que la confrontación armada alcance niveles desconocidos hasta ese momento. "Sin lugar a dudas el operativo militar lanzado contra el movimiento agrario del oriente del Tolima no tenía parangón en el pasado".46 Al hacerse insostenible la resistencia de Villarica, los campesinos organizaron su repliegue en las llamadas "columnas de marcha", el objetivo de estas columnas era: "evacuar a la mayoría de la población no apta para el combate, primero hacia los páramos y luego, bajo el inclemente fuego del ejército, hacia el cañón del río Duda y el Llano (...) Como comentó un viejo guerrillero, lo mismo hizo Bolívar, pero para abajo". 47
Estas marchas colonizadoras dieron como fruto la creación de núcleos agrarios, en los que los campesinos se organizaban en torno a la tierra, su producción y defensa armada. La producción era autogestionada y las armas les brindaban la defensa que el Estado no les proporcionaba frente al avance del latifundio48. La organización básica de estos núcleos, según Monseñor Germán Guzmán, se componía de:
1- El Comisario Político, es el adoctrinador que plasma conceptos nuevos. 2- El Jefe de la Comunidad, atiende a la autodefensa y régimen interno. 3- El Parcelador, entrega un lote de terreno a cada familia y dirime inapelablemente pleitos de linderos y posesión. 4- Un responsable en cada vereda. Los jefes de vereda forman el Estado Mayor. 5- Un Secretario general (generalmente mujer) atiende actas, propaganda y archivo 49
En el plano internacional, la posición colombiana frente a los Estados Unidos durante la Dictadura del General Rojas Pinilla, quedo clara el 13 de junio de 1954, cuando el embajador colombiano en Washington, Eduardo Zuleta Ángel, en entrevista transmitida por la radiodifusora la "Voz de América", manifestó lo siguiente:
La posición internacional de Colombia es de una claridad resplandeciente. Colombia es un país esencialmente anticomunista, fundamentalmente amigo de los Estados Unidos (...) Entre Moscú y Washington, Colombia escogió a Washington y obra con lógica. Dada la situación internacional actual, no se puede ser neutral en la guerra fría; o se es comunista, o se es declaradamente anticomunista y si se es anticomunista, debe lucharse contra el comunismo en todos los campos, como lo ha hecho Colombia, que ha luchado contra el comunismo en Corea.50
En la misma línea, el Brigadier General Gustavo Berrío, quien ejercía como Ministro de Guerra, afirmaba ante la opinión pública nacional, que: "El comunismo extranjero o nacional debe saber que en las Fuerzas Armadas tienen a su más poderoso y tenaz enemigo"51. Este alineamiento incondicional con la política exterior de los Estados Unidos, permitió que durante el gobierno de Rojas Pinilla, la venta de equipamiento militar por parte de los Estados Unidos, aumentara en comparación con el gobierno anterior, de hecho, el gobierno norteamericano se mostró más complaciente e incluso autorizo la venta de napalm.52
Al caer la dictadura de Rojas Pinilla en 1957, la Junta Militar de Gobierno que lo precedió, trató de repetir la experiencia de desarme que se presentó al inicio de la dictadura. Ante la nueva oferta de amnistía, las estructuras armadas comunistas se mantienen inactivas pero sin entregar las armas. Este mismo año, el PCC es declarado legal nuevamente y anuncia que actuará de esta manera. Además, un hecho externo que marca su actuar político inmediato, es el Manifiesto por la Paz, lanzado en Moscú por 66 partidos comunistas (incluyendo al colombiano). Esta declaración hizo colectivas las tesis del XX Congreso del PCUS, destacándose dos en especial: La coexistencia pacífica de los sistemas socialista y capitalista y la posibilidad de erradicar la guerra como medio de solución de conflictos internacionales53. Gracias a la apertura política del PCC, su movimiento agrario mantuvo por espacio de dos años una relativa tranquilidad, a pesar de tensiones y conflictos aislados.
Los inicios del Frente Nacional (1958-1966)
Con la presidencia del liberal Alberto Lleras Camargo (1958), se da inicio al Frente Nacional. En ese momento, las puertas de la democracia se cerraron para todos aquellos grupos, partidos o movimientos que no fueran liberales o conservadores. Contra esta realidad chocó el PCC y su nueva estrategia de apertura legal (electoral), ya que era un partido político legal pero no podía acceder a cargos públicos. Desde ese año, el estado de sitio y la exclusión perversa de terceras fuerzas políticas serán una constante en la historia de Colombia. Gilberto Vieira, define este sistema paritario liberal-conservador, de la siguiente manera: "la mitad del gobierno tenía que ser liberal y la otra mitad conservadora, y cuyo congreso seria también paritario, mitad liberal, mitad conservador (...) un partido tendría la presidencia 4 años y al otro le correspondería el periodo siguiente, y así se irían rotando".54
En el plano internacional, el Frente Nacional mantuvo su alineamiento con Estados Unidos. En 1959, el Canciller Julio Cesar Turbay, en discurso pronunciado ante la Cámara de Representantes, indicaba:
Los Estados Unidos tienen la doble condición de ser nuestro más grande y poderoso vecino y la primera potencia económica, científica y militar de los tiempos modernos. Nos movemos en la misma orbita y con ellos compartimos nosotros en la pequeña porción que corresponde a nuestras reducidas y limitadas capacidades la defensa de la civilización occidental.55
En diciembre de ese mismo año, el Canciller colombiano, en un discurso pronunciado en Río de Janeiro, profundizaba la relación de subordinación a los Estados Unidos, cuando sostenía que el aporte Latinoamericano a la construcción de la paz internacional, se asociaba de manera directa con el apoyo a la política internacional de los Estados Unidos. Según el Canciller Turbay:
Los veinte votos de la América Latina en las Naciones Unidas son indispensables para inclinar las decisiones del gran foro mundial hacia la causa que abanderan a plena satisfacción nuestra los Estados Unidos. Pero no sólo hemos estado obrando conjuntamente con aquella Nación en el campo político sino que hemos expresado nuestra solidaridad con ella llevando nuestras tropas a los campos de batalla y corriendo los riesgos propios de quienes participan en la guerra.56
Para el gobierno colombiano, la única manera de lograr instaurar el imperio de la paz en el escenario internacional, era apoyando irrestrictamente el accionar internacional de los Estados Unidos. De esta manera, Colombia, manifestó su abierta disposición a declarar al "comunismo internacional" como enemigo del hemisferio, asumiendo así, los intereses norteamericanos como propios57.
A nivel doméstico, hay que destacar lo referido al manejo autónomo (ajeno al control civil)que de la seguridad y el orden público, hicieran las Fuerzas Armadas colombianas, desde que el Presidente Alberto Lleras Camargo, en mayo de 1958, formulara su doctrina, en el famoso discurso que pronunciara frente a los Oficiales de las Fuerzas Armadas, destacados en Bogotá. En algunos apartes de dicho discurso, manifiesta textualmente:
Yo no quiero que las Fuerzas Armadas decidan como se debe gobernar la nación, en vez de lo que decida el pueblo, pero no quiero, en manera alguna que los políticos decidan cómo se deben manejar las Fuerzas Armadas, en su función técnica, en su disciplina, en sus reglamentos, en su personal58.
Lo que el presidente Lleras buscaba, era mantener a los militares neutrales frente a los partidos tradicionales y evitar la repetición de un Golpe de Estado. De esta manera, desde 1958 hasta 1990,59 la Doctrina Lleras, fue el único lineamiento político global en materia militar. Marcándose de este modo, un largo periodo de autonomía militar frente al poder civil. Este vacío, en la conducción política de las acciones militares, fue suplido por un improvisado diseño de políticas castrenses que señalaban el papel de las Fuerzas Armadas en la sociedad. Papel marcado por la conversión de la protesta social en un asunto de orden público, cuyo tratamiento era exclusivo de las Fuerzas Armadas60. Ante la ausencia, de una clara estrategia política, que condujera el esfuerzo militar del Estado, el anticomunismo contenido en la Doctrina de la Seguridad Nacional y marcado por la influencia de los Estados Unidos sobre el Ejército y el Estado colombiano, se convirtió en la directriz política que oriento el comportamiento militar durante 4 décadas. En este contexto, la Seguridad Nacional se entendió bajo una amenaza permanente por parte de fuerzas nacionales e internacionales ligadas al comunismo61.
Con este marco político, al iniciarse la década de 1960, se encontraban bajo control campesino e influencia comunista regiones como Marquetalia, El Pato, Río Chiquito, Guayabero, Sumapaz y la región del Río Ariari, ubicadas en los Departamentos de Cundinamarca, Meta y Tolima.62 En 1961 el congresista conservador Álvaro Gómez (hijo de Laureano Gómez), propuso la necesidad de acabarlas y someterlas al control del Estado.63 Los discursos de Alvaro Gómez, iban en la línea de identificar un "enemigo interno" al que había que atacar preventivamente con el fin de evitar su posible desarrollo.
Estos discursos, difundidos ampliamente en la prensa colombiana, gatillaron campañas militares contra las "repúblicas independientes" más importantes: Marquetalia, El Pato, Río Chiquito y Guayabero. Por parte del Ejército, las razones que justificaron la agresión armada contra los núcleos campesinos no fueron muy diferentes a las usadas en 1955 para atacar Villarrica:
Sin lugar a dudas las directivas comunistas habían fijado la región de Villarica-Sumapaz, como objetivo principal y baluarte primario para su futura expansión en toda nuestra patria; en el transcurso de los años alcanzaron una sólida organización en la que se creían invulnerables64.
La acción militar más importante para ocupar estas repúblicas independientes fue la de Marquetalia, que contó con la asesoría de Estados Unidos dentro del ambiente propio de la guerra fría; esta ayuda estaba destinada a frenar cualquier posibilidad de repetición de la revolución cubana.65 En medio de un agitado contexto en el que el Partido Comunista era marginado políticamente en las ciudades y reprimido militarmente en el campo. El PCC Celebra en junio de 1961 su IX Congreso, destacándose la aprobación por primera vez la tesis de "la combinación de todas las formas de lucha" . La resolución política del Congreso expresaba:
La revolución puede avanzar un trecho por la vía pacífica. Pero si las clases dominantes obligan a ello, por medio de la violencia y la persecución sistemática contra el pueblo, éste puede verse obligado a tomar la vía de la lucha armada, como forma principal, aunque no única en otro periodo. La vía revolucionaria en Colombia puede llegar a ser una combinación de todas las formas de lucha66.
En este contexto, el anticomunismo seguía siendo la filosofía articuladora del despliegue militar dirigido por el gobierno central. Esta idea, se encontraba sintetizada en los textos de los volantes distribuidos por el Ejército Nacional, en la zona de Villarrica a principios de 1962:
Campesinos: En los momentos actuales nuestra patria atraviesa una situación alarmante, toda vez que el comunismo, cuyas redes ha tejido a todo lo largo y ancho del territorio nacional, intenta enfrentar dos partidos tradicionales para sembrar el caos y la anarquía (...) Es necesario que el trabajador colombiano se dé perfecta cuenta de que solo laborando en completa armonía entre liberales y conservadores, lograra el fruto anhelado (...) que ignore en forma absoluta todas aquellas promesas que el Partido Comunista le hace para obtener su apoyo, ya que están basadas en el engaño (...) No os dejéis, campesinos, convencer o atemorizar por los conceptos errados que proclama el comunismo; denunciad ante las autoridades legítimamente constituidas todo acto que atente contra la vida, bienes y honra de nuestros ciudadanos67.
En esta línea de acción, el 27 de mayo de 1964, durante el gobierno del conservador Guillermo León Valencia, se inicia en firme la operación militar contra Marquetalia, bajo en el marco del Plan LASO (Latin American Security Operation) u Operación Soberanía. Esta operación dispuso de la totalidad de los helicópteros con los que contaban las Fuerzas Armadas, de unidades especializadas en lucha contrainsurgente, grupos de inteligencia y localización, aviones de combate T-33 y siete batallones del Ejército.68 Además, según reconoció el coronel encargado del operativo al representante antioqueño del Movimiento Revolucionario Liberal, Carlos Restrepo Arbeláez, quien efectuó un importante debate en la Cámara, existió asesoría de oficiales norteamericanos desde Neiva.69
La participación de militares norteamericanos en la Operación Marquetalia, iba en la línea de la política exterior colombiana, si se revisa, un discurso pronunciado por el presidente Valencia, en los días posteriores a su posesión, se verifica esta afirmación:
Desde el punto de vista de la política internacional el gobierno seguirá las luminosas huellas de mi ilustre antecesor, que corresponden a la más egregia tradición colombiana en esta materia. Ubicada dentro de la organización hemisférica y del lado del mundo libre (...) nos consideramos dentro de la órbita de los Estados Unidos de América, como potencia hegemónica, y hoy lo hacemos además con fervor y entusiasmo porque la gran democracia del norte ha rectificado con nobleza, justicia y valor indiscutibles viejos métodos imperialistas70.
Ante la inminencia del ataque militar, la dirección central del Partido Comunista, decide reforzar la presencia de cuadros políticos en la zona. Al respecto, Jacobo Arenas (Luis Morantes),71 escribía en su diario: "A Hernando Gonzáles y a mí nos cupo el gran honor de ser comisionados para cumplir esa tarea, el primero en representación de la Juventud Comunista y el segundo en la del Partido"' 72 La gran operación militar provoca la movilización del movimiento campesino de esta zona y la aparición de nuevos núcleos guerrilleros en Natagaima, Chaparral, Ariari y Sumapaz entre otros. Estas regiones están ubicadas en el centro occidente de Colombia, entre las cordilleras Oriental y Central.73 Como consecuencia de las acciones militares y los desplazamientos campesinos provocados por éstas, se fueron creando encuentros guerrilleros, que terminaron celebrando, el 20 de Julio de 1964, la conferencia que se denominó del "Bloque Sur", la que asumió el "Programa Agrario de las Guerrillas"74 Este programa planteaba una Reforma Agraria que liquidaría las bases de la propiedad latifundista.
Dos años después (1966) se convocó otra conferencia, que dio como resultado la fundación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)75. En el nacimiento de las FARC juega un papel destacado la tesis plateada por el PCC de combinar todas las formas de lucha, incluyendo la armada, que había sido aprobada en su IX Congreso y fue ratificada en el XXX Pleno de su Comité Central reunido del 26 al 29 de junio de 1964.76 Cabe destacar, que al revisar los documentos de la época (1964-1966), tanto de las FARC como del PCC, no se encuentran referencias directas a la Revolución Cubana, salvo en la Declaración Política de la segunda Conferencia Guerrillera del Bloque Sur (1966), en la que se hace alusión a la Conferencia Tricontinental de la Habana. Esto podía deberse al apego del PCC a los lineamientos políticos del PCUS, que para la época planteaba la coexistencia pacífica de los sistemas socialista y capitalista y la posibilidad de erradicar la guerra como medio de solución de conflictos internacionales. Esto evidenciaría que a pesar de haber asumido en 1961 la tesis de la "combinación de todas las formas de lucha", para el PCC, las autodefensas y guerrillas comunistas, eran instrumentos defensivos que servían como una reserva estratégica en el proceso de acceso al poder. De ahí, que ni en los peores momentos de represión la dirección del PCC se trasladara al campo77.
En este sentido Gilberto Vieira, Secretario General del PCC para la época, tomando distancia e ignorando directrices políticas y el accionar rural del PCC, se refería de esta manera a las FARC:
Son guerrillas campesinas que se identifican con la política del Partido Comunista (...) Hay que entender que, desde que se desata la lucha guerrillera, es absolutamente imposible que el partido asuma la dirección del movimiento armado. Este tiene su propia dirección, sus comandos operativos que actúan (...) el programa de las FARC es un programa en el que se manifiesta la influencia del pensamiento comunista78.
Este tipo de contradicciones políticas y su indefinición frente al tema cubano, hacen que un grupo de jóvenes, provenientes de las Juventudes Comunistas, se alejen del PCC y funden el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en 1964 y posteriormente el Ejército Popular de Liberación (EPL) de orientación maoísta. La influencia cubana en estas organizaciones insurgentes queda clara en los siguientes testimonios de sus fundadores:
Ernesto Rojas, comandante general del EPL, se refiere así a la influencia cubana:
Este proceso le daba la razón a los que criticaban a los partidos comunistas de la época, por descartar la lucha armada y negar la posibilidad de victoria a través de este medio (...) un grupo de revolucionarios al interior del Partido Comunista asimila la experiencia cubana y la critica a esa colectividad política que demerita la revolución por la vía de las armas (...) la gente era muy joven en ese año de 1964 y cometimos errores. El foquito estaba de moda y nos fue imposible apartarnos de esa influencia79.
Alonso Ojeda Awad, excomandante del ELN, se expresa de la siguiente manera sobre Cuba:
El impacto del triunfo cubano comienza a revolucionar nuestros espíritus y nuestros corazones, sentíamos el peso y la satisfacción de ser latinoamericanos, de vivir la vida de cada uno de los héroes de la Sierra Maestra, nos identificamos con su temprana juventud, con sus inacabables energías, con su espíritu antiyanqui, con la defensa de su suelo (...) por su apertura al socialismo (...) Cuba ha abierto las puertas a centenares de estudiantes no solamente de Colombia sino de toda América Latina. Los jóvenes deciden no seguir estudiando y asumir una actitud de defensa de ese logro (...) no son pocos los jóvenes latinoamericanos que entran a formar parte de los destacamentos militares cubanos80.
Pablo Beltrán, actual miembro del Comando Central del ELN, relata de esta manera el aporte cubano:
El ELN nace con un influjo muy fuerte de la Revolución Cubana (...) el Che estuvo pendiente de todo el proyecto desde su surgimiento. En el grupo de estudiantes que lo concibió había muchas diferencias, y el Che desempeño una labor de arbitraje entre ellos, para que hubiera unidad y para que el proyecto cuajara mediante la convergencia de las distintas vertientes de la izquierda que formaban parte de él81.
En este periodo, Colombia se mantuvo férreamente alineada con los Estados Unidos, apoyando la expulsión de Cuba del Sistema Interamericano, en enero de 1962. Este comportamiento frente al comunismo, tanto en el plano interno como en el externo se mantuvo invariable hasta finales de la década de los sesentas. El 11 de noviembre de 1967 el entonces comandante de las Fuerzas Armadas de Colombia, General Pinzón Caicedo, expresaba:
El comandante del ejército hace un llamado a la opinión ciudadana, consciente de sus deberes cívicos, a fin de que comprenda que la guerra presente es una guerra no solamente contra la fuerza pública (...) es sin ambages ni macarthismos, la gran guerra entre la democracia y el comunismo, llevada al teatro colombiano82.
Conclusiones
Desde un punto de vista político el Estado colombiano en el periodo histórico estudiado (1950 - 1966), puede considerarse como un Estado débil, precario o premoderno, ya que no ejerce los monopolios del control territorial y uso de la fuerza. Además presenta una continua deslegitimidad política, en palabras de Daniel Pécaut, la ilegitimidad del Estado colombiano consiste en su incapacidad para afirmar su influencia en la sociedad, debido en buena medida ni la simbología del intervencionismo económico ni la del intervencionismo social han tenido las condiciones de necesarias para asentarse en Colombia83.
Durante el periodo de tiempo analizado puede apreciarse unatendencia recurrente a utilizar la violencia para obtener objetivos políticos y unas débiles estructuras político-institucionales que, junto a una cultura política autoritaria resistente a los comportamientos democráticos, crean un complejo panorama social, político y económico que sirve como contexto de análisis.
El alineamiento irrestricto con los Estados Unidos y la adopción de la Doctrina de la Seguridad Nacional, basada en el anticomunismo, como filosofía política y militar, que tuvo a la guerra fría como telón de fondo. Fue una constante en el periodo de tiempo analizado. Tanto en gobiernos conservadores, como durante la Dictadura de Rojas Pinilla y en los inicios del Frente Nacional, hubo una clara intención de marginar políticamente y aniquilar militarmente el Partido Comunista Colombiano, factor determinante en el nacimiento y conformación de las FARC-EP.
Por su parte el Partido Comunista en la etapa de la Violencia (1948-1953), formula durante el XIII Pleno de su Comité Central, su política de autodefensa de masas, resumida en su consigna: "oponer a la violencia reaccionaria la violencia organizada de las masas", e iniciaba la reorganización leninista del Partido, articulando las autodefensas y guerrillas campesinas a sus referentes organizativos. Durante la Dictadura de Rojas Pinilla (1953-1957), es declarado ilegal y sufre la represión oficial. Dedicando parte de sus esfuerzos a la organización de autodefensas campesinas. En los inicios del Frente Nacional, en lo interno asume la tesis de la combinación de todas las formas de lucha y en el plano internacional de alinea con el PCUS y sus tesis sobre la coexistencia pacífica de los sistemas socialista y capitalista y la posibilidad de erradicar la guerra como medio de solución de conflictos internacionales. Por lo cual, para el PCC, las autodefensas y guerrillas comunistas, eran instrumentos defensivos que servían como una reserva estratégica en el proceso de acceso al poder.
2 LÓPEZ, Luis (compilador). "La gran Colombia y los Estados Unidos de América. Relaciones Diplomáticas, 1810-1831", Bogotá, Nomos Ltda, 1990, Tomo II, Pág. 66. Citado en: TOKATLIAN, Juan. "La mirada de la política exterior de Colombia ante un nuevo milenio: ¿ceguera, miopía o estrabismo?", Revista Colombia Internacional No 48, Universidad de los Andes, Bogotá, 2000, Pág. 35.
3 TOKATLIAN, Juan. "La mirada de la política exterior de Colombia ante un nuevo milenio: ¿ceguera, miopía o estrabismo?", Revista Colombia Internacional No 48, Universidad de los Andes, Bogotá, 2000, Pág. 36.
4 TURBAY, Julio Cesar. "Memoria del Ministro de Relaciones Exteriores", Imprenta Nacional de Colombia, Bogotá, 1959, Pág. 52.
5 TIRADO MEJÍA, Alvaro. "El gobierno de Laureano Gómez, de la dictadura civil a la dictadura militar", Nueva Historia de Colombia, Tomo II, Editorial Planeta, Bogotá, 1989, Pág. 91.
6 TOKATLIAN, Juan. Op. Cit. Pág. 37.
7 "La guerra de los supremos (1839-1942), derivó la división y diferenciación entre los partidos políticos. A lo largo de este convulsionado siglo, tanto liberales como conservadores se verán enfrentados por el sistema federalista o centralista y por la educación laica y religiosa" , tomado de: GÓMEZ, Diana. "La violencia en Colombia, Vorágine inconclusa de la historia" , Revista América Latina, Universidad Arcis, Santiago, 2007, Pág. 257.
8 GUZMÁN, Germán. "La violencia en Colombia. Parte descriptiva", Ediciones Progreso, Cali, 1968, Pág. 9.
9 PUENTES, Milton. "Historia del partido liberal colombiano", Editorial Praga, Bogotá, 1961, Pág. 568.
10 "Pájaro era el termino con que se hacía referencia a las bandas armadas afiliadas al partido conservador, que con la tolerancia de las autoridades civiles y policiales, asesinaban y desterraban a los miembros del partido liberal durante el periodo de la violencia. Todavía en las regiones esmeraldíferas del país se usa este término para señalar a los guardaespaldas de los jefes locales". Tomado de: DUNCAN, Gustavo. "Del campo a la ciudad en Colombia. La infiltración urbana de los señores de la guerra", Documento CEDE, Bogotá, 2006, Pág. 4.
11 CORTINA, Adela. Op. Cit. Pág. 58.
12 ROJAS, José. "La batalla contra el comunismo en Colombia", Bogotá, Empresa Nacional de Publicaciones, 1956. Pág. 73.
13 TIRADO, Alvaro. "El gobierno de Laureano Gómez, de la dictadura civil a la dictadura milita/", Op. Cit.Pág. 84 - 85.
14 Sobre la vida de Gaitán y las circunstancias sociales y políticas que rodearon su muerte véase: ALAPE, Arturo. "El 9 de abril, asesinato de una esperanza", Nueva Historia de Colombia, Tomo II, Editorial Planeta, Bogotá, 1989.
15 GÓMEZ, Diana. Op. Cit. Pág. 264.
16 HOBSBAWN, Eric. "La anatomía de la Violencia en Colombia", en Rebeldes Primitivos, Barcelona, Ariel, 1974, Pág. 264. Citado en: PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha", Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991, Pág. 39.
17 Ibíd. Pág. 265.
18 GOMEZ, Diana. Op. Cit. Pág. 265.
19 Dirigente histórico del Partido Comunista Colombiano, fue Concejal de Bogotá en 1936 y parlamentario en 1985 en representación de la Unión Patriótica. Fue Secretario General del PCC desde 1947 hasta 1991.
20 HARNECKER, Marta. "Colombia: Combinación de todas las formas de lucha", Ediciones Suramericanas, Bogotá, 1988, Pág. 27.
21 PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha" , Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991, Pág. 40.
22 Ibíd. Pág. 4.
23 Corporación Observatorio para la Paz. "Guerras inútiles. Una historia de las FARC", Intermedio Editores, Bogotá, 2009, Pág. 37.
24 SAMPER, Daniel. "¿Qué sabe la CIA sobre el 9 de abril?", Columna Cambalache, El Tiempo, Bogotá,, 4 de octubre de 2000. Citado en: Corporación Observatorio para la Paz. "Guerras inútiles. Una historia de las FARC" , Intermedio Editores, Bogotá, 2009, Pág. 51.
25 SÁNCHEZ, Gonzalo y MEERTENS, Donny. "Bandoleros, gamonales y campesinos. El caso de la violencia en Colombia". El Ancora Editores, Bogotá. 1983.
26 MEDINA, Medófilo. "Historia del Partido Comunista de Colombia" , Tomo I, CEIS, Bogotá, 1980. Pág. 104-117.
27 GUZMÁN, Germán. Op. Cit. Pág. 73.
28 "Con el transcurso de los años, la autodefensa llegara a ser para el Partido ""la organización de las masas para responder con la violencia revolucionaria a las agresiones que realizan las Fuerzas Armadas o bandidos a sueldo de los latifundistas y capitalistas. Es una preparación paramilitar de carácter de masas, que sirve para asegurar el trabajo, la tranquilidad, la vida y los bienes de quienes a ella se acogen. Igualmente representa una especie de resguardo para la existencia de las organizaciones de masas y para el trabajo del Partido Comunista. En condiciones de agresión total pude ser transformada rápidamente en movimiento guerrillero"". Tomado de: Vanguardia del Pueblo, 25 de octubre de 1949, citado en: Partido Comunista de Colombia. "La política y la táctica del Partido Comunista" , Editorial Colombia Nueva, Bogotá, 1967, Pág. 166.
29 HARNECKER, Marta. Op. Cit. Pág. 5.
30 TIRADO, Álvaro. Op. Cit. Pág. 88-89.
31 FORERO, Abelardo. Op. Cit. Pág. 116.
32 Laureano Gómez quería borrar cualquier rastro de la mala impresión que su anterior actitud hubiera podido causar en medio oficiales estadounidenses y asegurarse así un flujo continuo de ayuda económica y militar (...) No se debe olvidar tampoco que, por encima de lo que Laureano Gómez hubiera podido pensar sobre los Estados Unidos, sus credenciales como militante anticomunista eran irreprochables" . Tomado de: BUSHNELL, David. "Colombia. Una nación a pesar de sí misma" , Editorial Planeta, Bogotá, 2009, Pág. 302.
33 TIRADO, Álvaro. Op. Cit. Pág. 90.
34 TIRADO, Álvaro. Op. Cit. Pág. 92.
35 Ídem.
36 Ibíd. Pág. 108.
37 RESTREPO, Carlos. "25 años de evolución político-institucional: 1950-1975". Bogotá, Universidad Externado de Colombia, 1976. Citado en: TIRADO MEJIA, Álvaro. "Rojas Pinilla: del golpe de opinión al exilio", Nueva Historia de Colombia, Tomo II, Editorial Planeta, Bogotá, 1989, Pág. 116.
38 FORERO, Abelardo. "Un testimonio contra la barbarie política", Editorial Los Andes, Bogotá, 1953, Pág. 116.
39 "La Doctrina de la Seguridad Nacional, fue el sostén ideológico de las dictaduras militares en América Latina durante las décadas de 1960 y 1970, y fue ideada por el gobierno de Estados Unidos como forma de ejercer un contrapeso político en la región en el marco de la Guerra Fría. Las sucesivas administraciones estadounidenses temieron que la influencia de la revolución cubana de 1959 significara una expansión del comunismo en América Latina, y que el continente girara hacia la órbita soviética. En ese sentido, esta doctrina predicaba que la proliferación de la ideología socialista en los países latinoamericanos constituía una amenaza para la seguridad nacional de estas naciones, para lo cual creía necesario una ofensiva política y militar". Véase: ARENAS, Jacobo. "Cese el fuego", Editorial Oveja Negra, Bogotá, 1987, Pág. 72.
40 PIZARRO, Eduardo. "Los orígenes del movimiento armado comunista en Colombia" , Análisis Político No 7, mayo-agosto 1989, Pág. 12.
41 BEHAR, Olga. "Las guerras de la paz", Editorial Planeta, Bogotá, 1985, Pág. 19.
42 Ibíd. Pág. 20.
43 "El 10 de junio de 1954 la prensa conservadora informo acerca de la decisión tomada por el concejo de ministros para ilegalizar el Partido Comunista (...) el proyecto original de ilegalización presentado por Juan Uribe Cualla y otros constituyentes (...) rezaba así: ""El comunismo y demás partidos internacionales no podrán actuar en Colombia como organizaciones políticas. Se les declara fuera de la ley y ésta adoptará las medidas que sean indispensables para hacer efectiva la prohibición aquí decretada"", Citado en: PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha" , Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991, Pág. 104.
44 PIZARRO, Eduardo. Op. Cit. Pág. 31.
45 Ídem.
47 PIZARRO, Eduardo. Op. Cit. Pág. 27.
48 FERRO, Juan y URIBE, Graciela. "El orden de la guerra. Las FARC -EP entre la organización y la política", Centro Editorial Javeriano (CEJA), Bogotá, 2002, Pág. 26.
49 GUZMÁN, Germán. Op. Cit. Pág. 216.
Embajada de Colombia, Oficio y anexo sobre entrevista transmitida en la Voz de América dirigido al Excelentísimo Señor Teniente General Gustavo Rojas Pinilla, Washington, junio 14 de1954, Secretaria General del Ministerio de Relaciones Exteriores, caja 248, carpeta 43. Citado en: RODRÍGUEZ, Hernández. "La influencia de Estados Unidos en el Ejército colombiano 1951-1959". Medellín, La Carreta Editores, Universidad Nacional de Colombia, 2006. Pág. 42.
51 Ibídem.
52 En junio de 1953, el embajador de Estados Unidos en Colombia Philip Bonsal, informo al Secretario de Estado, Jhon Foster Dulles:
"Comandante en jefe de la Fuerza Aérea nos informa privadamente Fuerza Aérea colombiana arrojó aproximadamente 50 bombas Napalm fabricadas aquí, ingredientes de origen europeo, en apoyo ofensiva militar 7-10 de junio, culminó en la captura de la Colonia centro de la guerrilla del oriente del Tolima. El Presidente Rojas se informó, dio permiso Fuerza Aérea para el uso discreto del Napalm para esta operación solamente" . Citado en: PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha" , Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991, Pág.127.
53 Ibíd. Pág. 41.
54 HARNECKER, Marta. Op. Cit. Pág. 5.
55 TURBAY, Julio Cesar. Op. Cit. Pág. 52.
56 TURBAY AYALA, Julio. "La operación panamericana" , en: Política Internacional de Colombia, Bogotá, Imprenta Nacional, 1961, Pág. 159.
57 PARDO, Rodrigo. "La política exterior de la administración Barco", en: Análisis Político, No 2, 1987.
58 VALENCIA, Alvaro. "Testimonio de una época", Editorial Planeta, Bogotá, 1992, Pág. 344345.
59 En agosto de 1991 se nombró el primer Ministro de Defensa Civil, Rafael Pardo Rueda, después de que en 38 años (1953-1991) fue ocupado por 17 Generales.
60LEAL BUITRAGO, Francisco. Defensa y Seguridad Nacional en Colombia, 1958-1990, en: TOKATLIAN, JuanyLEAL BUITRAGO, Francisco (Compiladores). "Orden Mundial y Seguridad", Bogotá, Tercer Mundo Editores, IEPRI, 1994.
61 RODRIGUEZ, Hernández. Op. Cit. Págs. 2643.
62 VELEZ, María. "FARC-ELN: Evolución y expansión territorial", Revista Desarrollo y Sociedad No 47. 2001, Pág. 4.
63 Denuncia hecha en el senado el 25 de octubre de 1961. Disponible en el sitio web: Burn.ucsd.edu/-farc-ep/nuestra_historia/30_annos_de_lucha_por_la_paz.htm.
64 PIZARRO, Eduardo. Op. Cit. Pág. 37.
65 Información disponible en el sitio web: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=73464&titular="son-las-necesidades-del-pueblo-lo-que-ha-primado-para-las-farc"-
66 VIEIRA, Gilberto. "Nueva etapa de lucha el pueblo colombiano", Documentos Políticos, Febrero-marzo de 1965, Pág. 17, citado en: PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha", Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991, Pág. 172.
67 GUZMAN, Germán. FALS BORDA, Orlando y UMAÑA, Eduardo. "La violencia en Colombia", Tomo II, Taurus, Colombia, 2006, Pág. 314.
68 PIZARRO, Eduardo (1991). Op. Cit. Pág. 187.
69 Ibíd. Pág. 188.
70 El Tiempo, agosto 8 de 1962, citado en: LIZARAZO, Nelsy. "Política exterior colombiana 1962-1966: Anticomunismo, multilateralismo e integración fronteriza" . Revista Colombia Internacional No 10, Universidad de los Andes, 1990, Pág. 4.
71 Militante del Partido Comunista colombiano, fundador e ideólogo de las FARC-EP, fallecido en Agosto de 1990.
72 ARENAS, Jacobo. "Diario de la Resistencia de Marquetalia", ABP, sin fecha. Pág. 7.
73 Estas regiones se encuentran en los Departamentos de Tolima y Cundinamarca, ubicados en el centro de Colombia. Caracterizados por su alta producción agropecuaria y geografía montañosa.
74 El texto completo del Programa Agrario, se encuentra disponible en el sitio web: http://bolivarsomostodos.org/index.php?option=com_content&task=view&id= 157&Itemid=38
75 Esta Conferencia se llevó a cabo en la región del Río Duda en el Departamento del Meta, en ésta, además de nacer oficialmente las FARC, se crea el Estado Mayor y se plantea la necesidad táctica de expandir la acción guerrillera móvil a otras áreas de Colombia. Conformándose así, seis núcleos guerrilleros comandados por Manuel Marulanda Vélez, Jacobo Arenas (Miembro del Comité Central del Partido Comunista), Rigoberto Lozada, Carmelo López, Rogelio Díaz, JoséRivas y Ciro Trujillo. Esta información se encuentra disponible en el sitio web de las FARC-EP: burn.ucsd.edu/farc-ep/nuestra_historia/30_annos_de_lucha_por_la_paz_.htm
76 HARNECKER, Marta. "Colombia: Combinación de todas las formas de lucha", Ediciones Suramericanas, Bogotá, 1988.
77 PIZARRO, Eduardo (1991). Op. Cit. Pág. 53.
78 HARNECKER, Marta. Op. Cit. Pág. 12.
79 BEHAR, Olga. Op. Cit. Pág. 43-44.
80 Ibíd. Pág. 51-67.
81 BELTRAN, Pablo. "De la resistencia al poder popular" , Revista Contexto Latinoamericano, México, 2008, Pág. 7.
82 ARENAS, Jacobo. Op. Cit. Pág. 5.
83 PÉCAUT, Daniel. "Colombia: violencia y democracia", en: "Guerra contra la sociedad", Editorial Espasa, Bogotá, 2001, Pág 33.
Referencias
ARENAS, Jacobo. "Cese el fuego", Editorial Oveja Negra, Bogotá, 1987.
AROSTEGUI, Julio. "La violencia política en perspectiva histórica". Revista Sistemas 132-133, Violencia y Política, Madrid, junio de 1996.
BEHAR, Olga. "Las guerras de la paz", Editorial Planeta, Bogotá, 1985.
BELTRAN, Pablo. "De la resistencia al poder popular" , Revista Contexto Latinoamericano, México, 2008
BRAUD, Philippe. "Violenciaspolíticas", Editorial Alianza. Madrid, 2006.
BUSHNELL, David. "Colombia. Una nación a pesar de sí misma", Editorial Planeta, Bogotá, 2009.
Corporación Observatorio para la Paz. "Guerras inútiles. Una historia de las FARC", Intermedio Editores, Bogotá, 2009.
DEAS, Malcolm y GAITAN, Fernando. "Dos ensayos especulativos sobre la violencia en Colombia". FONADE, Bogotá, 1995.
DUNCAN, Gustavo. "Del campo a la ciudad en Colombia. La infiltración urbana de los señores de la guerra", Documento CEDE, Bogotá, 2006.
FERRO, Juan y URIBE, Graciela. "El orden de la guerra. Las FARC -EP entre la organización y la política", Centro Editorial Javeriano (CEJA), Bogotá, 2002.
FORERO, Abelardo. "Un testimonio contra la barbarie política" , Editorial Los Andes, Bogotá, 1953.
GUZMAN, Germán. "La violencia en Colombia. Parte descriptiva", Ediciones Progreso, Cali, 1968.
GUZMAN, Germán. FALS BORDA, Orlando y UMAÑA, Eduardo. "La violencia en Colombia" , Tomo II, Taurus, Colombia, 2006.
HARNECKER, Marta. "Colombia: Combinación de todas las formas de lucha", Ediciones Suramericanas, Bogotá, 1988.
LIZARAZO, Nelsy. "Política exterior colombiana 1962-1966: Anticomunismo, multilateralismo e integración fronteriza". Revista Colombia Internacional No 10, Universidad de los Andes, 1990.
MEDINA, Medófilo. "Historia del Partido Comunista de Colombia", Tomo I, CEIS, Bogotá, 1980
OSORIO, Oscar. "Historia de una pájara sin alas", Programa Editorial, Universidad del Valle, Cali, 2003.
PARDO, Rodrigo. "Lapolítica exterior de la administración Barco", en: Análisis Político, No 2, 1987.
PÉCAUT, Daniel. "Colombia: violencia y democracia", en: "Guerra contra la sociedad", Editorial Espasa, Bogotá, 2001.
PIZARRO, Eduardo. "Los orígenes del movimiento armado comunista en Colombia", Análisis Político No 7, mayo - agosto 1989.
PIZARRO, Eduardo. "Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha" , Tercer Mundo Editores, IEPRI, Bogotá, 1991.
Revista Resistencia No 36. Comisión Internacional de las FARC -EP, octubre de2006.
RODRIGUEZ, Hernández. "La influencia de Estados Unidos en el Ejército colombiano 1951-1959". Medellín, La Carreta Editores, Universidad Nacional de Colombia, 2006.
SÁNCHEZ, Gonzalo y MEERTENS, Donny. "Bandoleros, gamonales y campesinos. El caso de la violencia en Colombia". El Ancora Editores, Bogotá. 1983.
TIRADO MEJIA, Álvaro. "Rojas Pinilla: del golpe de opinión al exilio", Nueva Historia de Colombia, Tomo II, Editorial Planeta, Bogotá, 1989.
TOKATLIAN, JuanyLEAL BUITRAGO, Francisco (Compiladores). "Orden Mundial y Seguridad", Bogotá, Tercer Mundo Editores, IEPRI, 1994.
TOKATLIAN, Juan. "La mirada de la política exterior de Colombia ante un nuevo milenio: ¿ceguera, miopía o estrabismo?" , Revista Colombia Internacional No 48, Universidad de los Andes, Bogotá, 2000.
TURBAY, Julio Cesar. "Memoria del Ministro de Relaciones Exteriores", Imprenta Nacional de Colombia, Bogotá, 1959.
TURBAY AYALA, Julio. "La operación panamericana" , en: Política Internacional de Colombia, Bogotá, Imprenta Nacional, 1961.
VALENCIA, Alvaro. "Testimonio de una época", Editorial Planeta, Bogotá, 1992.
VELEZ, María. "FARC-ELN: Evolución y expansión territorial", Revista Desarrollo y Sociedad No 47. 2001.
WALDMAN, Peter. "Diferentes formas de violencia política", Revista Internacional de Sociología, Madrid, 1992.
WEBER, Max. "Elpolítico y el científico", Alianza Editorial, Madrid, 1972.
Sitios web consultados:
Sitio web de las FARC-EP: burn.ucsd.edu/farc-ep/nuestra_historia/30_annos_de_lucha_por_la_paz_.htm
http://bolivarsomostodos.org/index.php?option=com_content&task=view&id=157&Itemid=38
Memorias |