ISSN Electronico 1794-8886 Volumen 26, mayo-agosto de 2015 Fecha de recepción: 31 de enero de 2015 Fecha de aceptación: 25 de mayo de 2015 DOI: http://dx.doi.org/10.14482/memor.26.7185

Glória Tega-Calippo

Periodista (Pontificia Universidad de Campinas-PUC-Campinas), Brasil especialista en Divulgación Científica (Universidad de São Paulo-USP), Máster en Divulgación Científica y Cultural (UNICAMP), colaboradora del Laboratorio de Arqueología Pública (LAP-UNICAMP) Mail: gloriatega@uol.com.br

Pedro Paulo Funari

Profesor Titular, Departamento de Historia, coordinador del Núcleo de Estudios e Investigaciones Ambientales (NEPAM) y del Laboratorio de arqueología Pública (LAP)- UNICAMP. Campinas (Brasil) Mail: ppfunari@uol.com.br

Resumen

Este artículo trata sobre los inicios e la relación entre la Arqueología y su divulgación. Primero trazaremos un panorama histórico de las dos áreas. Después presentaremos datos cuantitativos referentes a la divulgación de la arqueología en el periódico Folha de São Paulo. Los dos momentos aquí expuestos son importantes al permitir una reflexión sobre las actuales prácticas de divulgación de la arqueología al gran público en Brasil.

Palabras clave: Arqueología, Divulgación, Prensa, Brasil, Folha de São Paulo.

Abstract

This paper discusses the relation ship between - Archeology and the scientific communication, since its beginning until the present days. At first, we perform a historical overview of the two areas. Then, we present quantitative data concerning the difussion of Archeology in the newspaper Folha de São Paulo. These two moments are important because they provide a reflection on the current practices of the communication of Archeology to the general public in Brazil.

Keywords: Archeology, Science Dissemination, Press, Brasil, Folha de São Paulo.

Resumo

O presente artigo trata desde as origens da relação entre a ciência – Arqueologia e sua divulgação. De início, trazemos um panorama histórico das duas áreas. Em seguida, apresentamos dados quantitativos referentes à divulgação da Arqueologia no jornal Folha de São Paulo. Esses dois momentos expostos aqui são importantes pois proporcionam uma reflexão a respeito das práticas atuais de divulgação da Arqueologia ao grande público no Brasil.

Palavras-chave: Arqueologia, Divulgação, Imprensa, Brasil, Brasil, Folha de São Paulo.

Relación Arqueología y divukgación: Sus inicios

La arqueologia ha estado ligada a la divulgación desde sus principios y, en un cierto sentido, siempre se ha beneficiado de esa asociación con el gran público. Pompeya, la antigua ciudad romana enterrada por la erupción del monte Vesubio en el 79 después de Cristo fue redescubierta a mediados del siglo XVIII. Podemos decir que dio inicio a la Arqueologia a partir del desenterramiento de la ciudad y de la divulgación de las antiguas pinturas, estatuas y artefactos que contenia.¹ La naciente disciplina surgía al albor de la modernidad y de los medios de comunicación, y, en particular, de la prensa, que quedaria marcada y en relación directa y umbilical con el gran público. Desde ese momento dicha correspondencia fue esencial y omnipresente, como atestiguan las campañas napoleónicas en Egipto, los éxitos de taquilla de las exposiciones arqueológicas, la creación de escuelas de arqueología en Atenas y Roma o las aventuras de Schlieman en busca de la ruinas de Troya, ejemplos de cómo el público lego se encontraba en el centro de las decisiones académicas y las del estado.

Durante el siglo XIX , aún en los origenes de las sociedades de masas y de la democratización, , se profundizó mucho en esta situación al aumentar la inclusión de social en las sociedades occidentales imperialistas, protagonistas además, del desarrollo de la arqueología, en particular en Gran Bretaña, Francia y Alemania. La extensión del derecho al voto y la creciente democratización trajeron la difusión de la prensa popular y de libros destinados a las personas corrientes en ediciones de bolsillo para la lectura en el metro. Se puede considerar a Vere Gordon Childe (1892-1957) como la culminación de esta tendencia e, con auténticos best-sellers como Man Makes Himself, 1936 ('Los orígenes de la civilización'—y WhatHappened in History, 1942 ('¿Qué pasó en la historia?'), obras dirigidas al lector del metro londinense, pero que se volvieron lecturas de referencia en trenes y autobuses urbanos en muchos países, incluido Brasil. La llegada de la radio traería nuevos medios de difusión a gran escala y sería el colega y compañero de Childe, aunque de muy diferente perspectiva y posición política Mortimer Wheeler (1890-1976) quien cumplió un papel -innovador. Mientras Childe provenía de Australia, del Partido Laborista, y había propugnado un evolucionismo de corte marxista, Wheeler era británico de pura cepa, militar imperial y uno de los epígonos del pragmatismo conservador. Sus programas de radio y, después, en la televisión se convirtieron en el prototipo de todo lo que vendría a continuación y pondrían la arqueología no sólo en los metros, como ya hizo Gordon Childe, sino también en los salones, temas de conversaciones, charlasfamiliares y en los pubs.

La arqueología seguiría por esa línea de llegar hasta el gran público aunque no siempre ni necesariamente por la pluma o la voz de los arqueólogos profesionales. Este fue el caso del ingeniero, médico y jurista alemán Werner Keller (1909-1980), que se dio a conocer por todo el mundo por la novela periodística Göter Gräber Und Gelehrte-. Roman der Archaologie (Dioses, túmulos y sabios: la novela de la arqueología), publicado en alemán en la inmediata posguerra, en 1949, inmediatamente traducida a muchos idiomas, incluido el portugués, publicado en decenas de ediciones, así como su Und die Bibelhatdochtrecht (La Bíblia tenía razón) de 1955, de idéntico éxito. Keller no era un arqueólogo profesional pero hizo más por la difusión de la pasión por la arqueología que muchos otros, con la posible excepción de Childe y Wheeler. En su país Keller era un periodista presente en la Nordwesdeutcher Rundfunk (Radiodifusión del noroeste de Alemania) y en periódicos y revistas como Die Welt, Die Zeit y Neue Illustrierte.

Al otro lado del océano, en Estados Unidos, la arqueología llegaba también al gran público, pero en menor grado, gracias a los arqueólogos profesionales y al dinamismo de su industria cultural. Así, la National Geographic Magazine, desde 1888 trató diversos asuntos, entre ellos arqueológicos, no sólo del Viejo Mundo sino también del continente americano. En la misma línea de la popularización de temas arqueológicos el cine norteamericano fue responsable desde muy temprano de su tratamiento, aunque muchas veces junto con historias sobre la Antigüedad escritas en el Renacimiento o en épocas posteriores. Aun así en ellas las reconstrucciones de edificios y lugares siguieron cuidadosamente los vestigios arqueológicos e incitaron un gran interés por la disciplina.²Las películas sobre arqueólogos aventureros como Indiana Jones (1981-2008) y Lara Croft: Tomb Raider (2001- 2003) representan una continuación de esta trayectoria. En el ámbito académico el gran popularizador de la disciplina desde los años sesenta ha sido el británico más activo Brian Fagan (nacido en 1936), tanto por ser el más prolífico como el más leído.

En los últimos años la difusión a través de internet y de la red www ha traído un crecimiento aún más notable de la intersección entre la arqueología profesional y académica, y la difusión para el gran público. Por un lado, como destaca Ian Hargreaves (2005), los blogs han supuesto la dispersión ad infinitum del derecho de expresar opiniones, antes restringido a quienes podían acceder a una publicación, sujeta además a diversas limitaciones. En el caso específico de la arqueología han surgido cientos de blogs arqueológicos, tanto profesionales como amateurs o de personas sin ninguna formación específica, pero no por ello menos hábiles a la hora de gestionar blogs. Como consecuencia de este proceso la propia difusión de cánones y de lo que el sociólogo francés Pierre Bourdieu llamó el sentido común académico se ha vuelto más frágil fuera de los muros de las instituciones. En la ciencia aún prevalece la valoración entre pares; la formación de nociones, paradigmas y verdades se da por parte de estudiosos que controlan puestos académicos, revistas académicas y agencias de financiación de la investigación y que inducen a la aceptación de ciertas ideas por un determinado tiempo. A través de una comparación, Bourdieu mostró cómo la academia funcionó de manera similar cuando la Inquisición juzgó a Galileo. En aquella época prevaleció el juicio por pares y Galileo tuvo que conformarse y aceptar que el sol se movía alrededor de la tierra aunque, irónico, pudiese afirmar a continuación y sin embargo (la tierra) se mueve. Por lo tanto según Bourdieu y otros estudiosos ese mecanismo de imposición de opiniones sancionadas por los pares (o doxa) fue eficaz y aún lo es en gran medida en el ámbito académico en el sentido estricto. No obstante, la multiplicación de voces más allá del control arbitrario inter pares también ha causado la profusión, algunos dirían que cacofónica, de interpretaciones sobre todo, incluso en el ámbito arqueológico. Como dice Ian Hargreaves: Se suponía que el periodismo proporcionaba informaciones fiables sobre lo real. Ahora, al parecer, un popurrí de periodismo, entretenimiento e info-entretenimiento establece aquello que se toma por real.³

En internet y en el mundo de la información las narrativas sobre lo real son más relevantes que una supuesta realidad, lo cual, lógicamente, va en contra de entre otras cosas de los dictámenes del sentido común académico establecido por los pares. Veamos algunos ejemplos arqueológicos: según la doxa vigente: nunca existieron contactos significativos entre el Viejo y el Nuevo Mundo antes de la llegada de españoles y portugueses al final del siglo XV a América. En la academia la visión contraria a esta opinión se encuentra marginalizada como reconoce un defensor de la tesis de los contactos en época fenicia, el físico, matemático e historiador de la ciencia italiano Lucio Russo (2013). Aun así las pruebas presentadas por Russo, como la supuesta representación de una fruta americana, la piña, en época romana, o de juguetes pre-colombinos procedentes de Vera Cruz, en México, con algo que no era conocido en América, la rueda, constituyen argumentos para la difusión de ideas heterodoxas- opiniones diferentes de las sancionadas entre los pares- sobre los contactos entre las civilizaciones de un lado a otro del Atlántico. Otro caso, completamente diferente se refiere a los vestigios arqueológicos de las márgenes del Mar Muerto, en Qumram. La diferencia comienza por la ausencia de una ortodoxia sobre la interpretación de los vestigios, lo cual se debe a diversos factores.⁴ Pero a diferencia del caso anterior, de los supuestos contactos entre América y el Viejo Mundo antes de Colón (o de los vikingos), existen muchos documentos escritos que se refieren a al lugar y existen incluso manuscritos que provinieron de los alrededores. Se da, pues, un problema metodológico y teórico de fondo en la forma en que se relacionan esas dos categorías de fuentes: los vestigios materiales y los escritos.⁵ Esta situación compleja también favorece la profusión de narrativas que se difunden de manera externa al control de los profesionales y de la academia, como aquellas que elucubran sobre Jesús en la secta de los esenios, en Qumram.

En ambos casos, tanto el del contacto de América con el Viejo Mundo como el de Qumram existe una diversidad de relatos en torno a cuestiones arqueológicas que se difunden fuera del control de los profesionales. Por otro lado, como alerta Hargreaves, la narrativa se vuelve realidad y ni los propios arqueólogos consiguen sustraerse a la influencia de los medios de comunicación en sus interpretaciones. Esto ya había sido explicitado por Richard Wilk (1985) cuando decía que los arqueólogos interpretaban los vestigios de la civilización maya a partir de lo que leían en la revista Time acerca de su propia época⁶ así como Richard Hingley (2005) cuando escribía que los arqueólogos habían interpretado el mundo antiguo en base a aquello que habían aprendido cuando niños. A continuación presentaremos un estudio de caso sobre la relación entre los medios de comunicación y la Arqueología en Brasil.

La ordenanza N° 230 de 2002

Desde la implantación de la ordenanza 230 del Instituto do Patrimonio Histórico y Arqueológico Nacional ( sigla IPHAN ) en Diciembre de 2002, que pasó a exigir que los permisos ambientales contemplasen también la investigación arqueológica, asistimos a un gran crecimiento de la arqueología en Brasil. Se crearon empresas especializadas en la realización de licencias de obras, las universidades pasaron a adecuarse para poder llevar a cabo los controles de obras al igual que las empresas privadas. Además ha aumentado la demanda de arqueólogos profesionales y se han creado cursos de graduación en arqueología, antes considerada sólo una asignatura de posgrado. En resumen la arqueología brasileña amplió su actividad, las investigaciones ganaron espacio dentro y fuera de las universidades y así se configuró un mercado de acción.

La citada ordenanza estableció también que la sociedad debería ser compensada por los posibles daños causados al patrimonio arqueológico, haciendo más evidente la arqueología. Dicha ciencia llegaba a la población en forma de conferencias, cuadernillos escolares, diversos cursos, visitas guiadas a los yacimientos, y museos creados con la cultura material procedente de las investigaciones realizadas para las obras entre muchas otras acciones.

Por otro lado, en cuanto a los medios de comunicación, la realidad sobre este proceso en la arqueología no parece tener un reflejo en lo que concierne a la divulgación impresa. Siguiendo la difusión de la arqueología en el periódico Folha de São Paulo entre los años 2000 y 2010 una investigación (Máster) de Tega-Calippo⁷ concluyó que las investigaciones llevadas a cabo en Brasil aún se publican poco en los medios de comunicación de masas. Actualizando esos datos del período 2000 - 2013 proponemos un análisis cuantitativo de los datos anteriormente recogidos.⁸

Selección cuantitativa

En la citada investigación de Máster, la selección de noticias que hacen referencia a la arqueología publicadas en el periódico Folha de São Paulo, se concretó escogiendo textos de todos los géneros periodísticos que aparecieran en la herramienta de búsqueda del periódico, teniendo en cuenta las palabras arqueología, arqueológico, arqueólogo, excavación (y variaciones de género y número), para señalar el área de conocimiento o cualificar el lugar de investigación o los objetos estudiados. Por lo tanto la investigación se hizo por medio de la página www.folha.uol.com.br.

Esos datos fueron pues comparados con selecciones de ordenanzas de autorización y permiso emitidos para investigaciones arqueológicas realizados por Wichers (2010) y Zanettini (2011 y com.pess)⁹

Noticias e investigaciones

Wichers y Zanettini traen un panorama general de lo que está siendo estudiado en el país en lo que concierne a la arqueología a través de las ordenanzas emitidas por el IPHAN, ya que tanto para llevar a cabo investigaciones en arqueología preventiva como para realizar investigaciones académicas, los arqueólogos deben de manera obligatoria someter al IPHAN el proyecto científico que pretenden resolver, acompañado de otros documentos que prueben la idoneidad del proponente, los medios de costeo para su realización y el destino final de los datos generados por la investigación.¹⁰A continuación el IPHAN, órgano brasileño responsable por la autorización y permiso para la realización de investigaciones arqueológicas, su seguimiento y control; y la aplicación de varias acciones de socialización del patrimonio arqueológico"¹¹ emite ordenanzas, representadas cuantitativamente por el siguiente gráfico.

Según los autores citados la media anual del incremento de las investigaciones es de aproximadamente el 20%; además de esto, las investigaciones académicas corresponden al 5% del total.

¹²

Considerando que el número de investigaciones creció de manera tan evidente, el número de textos publicados sobre arqueología en los medios de comunicación de masas podría haber reflejado esta tendencia, aunque fuese tímidamente, a pesar de que el espacio físico destinado a las noticias que tratan spbré ciencia no se haya alterado significativamente en los periódicos de gran circulación.

En primer lugar, para definir un texto como noticia sobre Arqueología, se partió del concepto formulado por Funari, según el cual la arqueología estudia, directamente, la totalidad material apropiada por las sociedades humanas como parte de una cultura total, material e inmaterial sin limitaciones de carácter cronológico,¹³

En segundo lugar, la elección de la Folha de São Paulo se dio por tratarse de un periódico con sede en São Paulo, el estado con mayor número de investigaciones arqueológicas en su territorio, de acuerdo con Wichers (2010), pero también un periódico de circulación nacional, por lo cual puede además cubrir investigaciones arqueológicas realizadas en todo el territorio brasileño. Además de esto, en el año 2010 se trataba de la publicación impresa diaria de Brasil con mayor tirada, según la Asociación Nacional de Periódicos,¹⁴ considerada actualmente en segundo lugar.

Los textos han sido clasificados en primer lugar atendiendo al lugar al cual de referencia Brasil o mundial. Las primeras fueron clasificadas como susceptibles de comparación con las ordenanzas de autorización y permiso emitidas para las investigaciones del IPHAN, para comprobar si realmente se trataban de investigaciones arqueológicas, las cuales posteriormetne se dividían en investigaciones de Arqueología preventiva e investigaciones académicas. En la Tabla 1, se presenta un panorama general de este relevamiento:

Así la primera afirmación que podemos hacer, observando la tabla citada, es que a excepción del año 2000, el número de noticias que hablan de asuntos relacionados con la Arqueología en el mundo siempre fue superior a las relacionadas con Brasil, como sugieren Amorim y Massarani cuando afirman que existe un predominio de noticias provenientes del exterior en los periódicos (...), en particular de los países del llamado primer mundo,¹⁵ incluso después de 2003 cuando el número de publicaciones ya debería empezar a reflejar el crecimiento del número de investigaciones, puesto que la ordenanza 230 del IPHAN se instituyó en Diciembre de 2002.

En cuanto al período2000-2013, obsérvese el siguiente gráfico:

En el año 2000 queda claro no sólo que el número de noticias sobre arqueología en el mundo fue menor que las referidas a Brasil, pero también que, de manera general la arqueología como asunto se hizo más presente en el total de los textos publicados ese año en comparación con los demás años. Estos hechos se pueden explicar por el gran número de noticias relacionadas con las conmemoraciones de los 500 años de Brasil, lo que posiblemente ocasionó también varias discusiones sobre dicha ciencia.

Ordenanzas versus noticias

Hechas las comparaciones referidas a asuntos en Brasil y el resto del mundo, a partir de ahora consideraremos las ordenanzas de autorización y permiso de investigación emitidos por el IPHAN y publicadas en el Diário Oficial da União entre Enero de 2003 y Diciembre de 2013, obtenidos por Wichers y Zanettini. A través de ellas se puede hacer una comparación directa con las noticias publicadas por la Folha de São Paulo (2000-2013) , puesto que se refieren a la realización de investigaciones arqueológicas propiamente dichas, que tienen muchas más posibilidades de convertirse en noticias periodísticas.

En el Gráfico 3 se pueden observar datos relativos al número de textos publicados en el mencionado diario.

En el gráfico el número de publicaciones de noticias cuyo asunto son investigaciones arqueológicas en Brasil resulta inconstante pero es posible distinguir un ligero crecimiento a partir de 2004 en torno al 11% de la publicación de noticias, distinto del porcentaje de 17 a 20% en Portarias al año de media como sugiere Zanettini (2009). Tampoco se observa crecimiento en el número de noticias publicadas en el bienio 2007-2008, periodo en el cual Zanettini (2009) observó un pico de crecimiento del 34% en la emisión de ordenanzas.

En cambio al observar el gráfico 3 se puede notar que, entre 2003 (año posterior a la publicación de la ordenanza) y el 2006 hay una oscilación, pero dentro de una media cercana a las 20 noticias por año. Excluyendo el año de 2000, pues se trata de una excepción, la media anual de noticias publicadas es de 16 (sumando las noticias de 2001 a 2013 y dividiendo entre 13).

En el periodo entre 2007 y 2010 asistimos a una tendencia de crecimiento, de hecho, pero la base es muy pequeña. Los años de 2001, 2007, 2008, 2009, 2011 y 2012 están debajo de la media general del período, pues los años de 2007 y 2011 son los que menos publicaciones tuvieron. Se destacan los años de 2011 y 2012, cuando se detecta una fuerte caída en el número de noticias publicadas, a pesar de registrarse un ascenso en el número de investigaciones. 2013 fue el año en que se concretaron más investigaciones arqueológicas en Brasil, aunque el número de noticias publicadas no se destacaron , fueron solamente 20. Los datos recogidos muestran que el número de noticias publicadas llega a ser mínimo frente al número de investigaciones realizadas, al compararse los mismos años de las dos muestras y no refleja, por tanto, el crecimiento de las investigaciones realizadas en Brasil. Incluso contando sólo con los datos de noticias publicadas y sin disponer de los datos de las ordenanzas entre los años 2000 y 2002, merece la pena poner las cifras en relación con las ordenanzas de autorización de permiso y con el número de noticias publicadas y con las « ordenanzas citadas. Así, en el gráfico 4 queda clara la falta de divulgación en la Folha de São Paulo de las investigaciones sobre Arqueología en Brasil.

Arqueología preventiva versus Arqueología académica

Otra discusión presente en la arqueología brasileña es la cuestión del carácter científico o no de la arqueología preventiva. O sea, de cuánto de aquello que la ley exige se cumple en la realidad, ya que en teoría el tiempo concedido para la consumación de las investigaciones en arqueología preventiva no sería el ideal, estando sometido a presiones por la necesidad de finalizar la obra. Por el contrario las investigaciones académicas podrían hacer uso del tiempo en función de sus necesidades al no sufrir las presiones de los constructores. No es este el lugar para ese tipo de discusiones, que exceden el objetivo de este trabajo. Hacemos esta mención sólo para, en primer lugar, llamar la atención sobre el hecho de que a través de los números que se recogen en la Folha de São Paulo no es posible llegar a ninguna conclusión sobre cuáles proyectos tienen mayor visibilidad en la prensa, si los de arqueología preventiva o los de arqueología académica y, en segundo lugar, porque se pretendió verificar si las noticias seguían la tendencia sugerida por Zanettini y Wichers, según los cuales la mayoría de las ordenanzas de autorización y permisos concedidas hoy en Brasil estarían dirigidas a la concesión de licencias ambientales. Veamos el siguiente gráfico:

En el periodo analizado, los años 2000, 2002, 2003, 2005, 2006 y 2008 presentaron los mayores números de noticias publicadas sobre arqueología académica. En 2001, 2004, 2007, 2009, 2010, 2011 y 2012 existieron más noticias relacionadas con las investigaciones de arqueología preventiva. En el año 2013 se dio un empate. Es interesante destacar que, junto con inconstancia en el número total de noticias publicadas con el transcurso de los años, tampoco se puede considerar constante el número de noticias sobre arqueología preventiva ni arqueología académica, ni tampoco que sea creciente ni decreciente. Sólo podemos decir que en los últimos años la tendencia hacia un mayor

número de investigaciones en arqueología preventiva se refleja de alguna manera en el número de noticias publicadas. También resulta interesante notar que algunas de esas noticias clasificadas como relacionadas con investigaciones de arqueología preventiva tienen como principal entrevistado a un arqueólogo perteneciente a alguna universidad. O sea, son noticias que tratan efectivamente de investigaciones realizadas para la concesión de licencias de obras aunque el contrato para realizar ese trabajo fuera a una universidad, generalmente pública. Cabe suponer que ese dato tenga origen en tres aspectos: primero, las asesorías de comunicación de las instituciones de enseñanza probablemente tuvieron una actuación en el sentido de divulgar las pesquisas realizadas, incluso tratándose de investigaciones en arqueología preventiva; en segundo lugar, los profesionales implicados en las investigaciones probablemente ya sean fuentes¹⁶ consultadas anteriormente para la elaboración del discurso periodístico; en tercer lugar, en relación a la fiabilidad, la Folha de São Paulo clasifica sus fuentes según un ordenamiento decreciente en relación a la fiabilidad, que va del Tipo cero al Tipo cuatro'. La fuente Tipo uno, clasificada por la Folha de São Paulo como la más confiable en los casos en que la fuente es una persona. (...) con un historial de fiabilidad (...). Habla con conocimiento de causa (...) y no tiene intereses inmediatos en su divulgación¹⁷ Creo que sería en esta categoría en la que se encuadran los arqueólogos pertenecientes a instituciones de enseñanza que han actuado como fuentes para noticias que tratan sobre proyectos de arqueología preventiva.

Noticias por estado versus investigaciones por estado¹⁸

¹⁹

De manera general, para el periodo analizado, como ya se apuntó en otro momento, el estado de São Paulo es la unidad de la federación sobre la que más noticias se publicaron en relación con investigaciones arqueológicas en su territorio. Wichers contabilizó 635 ordenanzas de autorización y permiso emitidas para investigaciones en el periodo de 2003 a 2009.²⁰ En la selección de noticias publicadas en la Folha de São Paulo , el estado también contó con un número mayor (75), o sea, el 35,4% de todas las noticias del periodo de 2000 a 2013. Wichers afirma que el estado también representa por lo menos el 14% de las investigaciones realizadas en el territorio nacional²¹Sin que podamos decir que haya compatibilidad entre ordenanzas de autorización y permisos emitidos y noticias publicadas, podemos sugerir una cierta tendencia.

No deja de ser cierto también que, por el hecho de que la Folha de São Paulo tiene su sede en São Paulo es posible que el número de noticias publicadas sobre las investigaciones realizadas en suelo paulista se explique por la proximidad, uno de los criterios que los periodistas utilizan para decidir sobre aquello que constituye o no noticia: cuanto mayor es la proximidad geográfica entre el hecho generador de la noticia y el lector, más importante resulta²² -aunque el mencionado diario no divulgue si la tirada de sus ejemplares es o no mayor en el estado de São Paulo se puede deducir que el número mayor de lectores de dicho periódico de circulación nacional es de São Paulo, generalmente procedentes de los habitantes de la capital del estado y su región metropolitana.

Consideraciones finales

La relación arqueología y prensa siempre ha sido esencial y omnipresente, desde el surgimiento de ambas. En el siglo XIX, la extensión del derecho al voto y la creciente democratización trajeron como consecuencia la difusión de la prensa popular y de los libros destinados a las personas del común. Se puede considerar la culminación de esta vertiente a Vere Gordon Childe (1892-1957) con su gran cantidad de obras dirigidas al público en general. . En el siglo XX el surgimiento de la radio y la televisión hizo que la arqueología se volviese más presente en la vida cotidiana de las personas. Y así siguió llegando cada vez más hasta el gran público no sólo a través de los científicos, sino también de otros profesionales que se volvieron divulgadores. Las películas sobre arqueólogos aventureros también se hicieron muy populares y, más recientemente, el surgimiento de la red www ha terminado dando aún más notoriedad a la arqueología.

Por otra parte, en Brasil todavía asistimos a la formación de una arqueología muy diferente de aquella que se publica mayoritariamente en nuestros periódicos. Nuestras investigaciones aún se encuentran en segundo plano. Esto se puede observar numéricamente al comparar el registro de las ordenanzas de investigaciones arqueológicas publicadas por el IPHAN de 2003 a 2009, realizado por Zanettini y Wichers, con la selección de noticias que hacen referencia a la arqueología, publicadas en la Folha de São Paulo, entre los años 2000 y 2013. La relación entre noticias y ordenanzas siguió una tendencia de compatibilidad sólo en los aspectos concernientes al pico de crecimiento en la publicación de ordenanzas en el bienio 2007-2008, al predominio de noticias relacionadas con la arqueología preventiva a partir de 2009 y a la coherencia en relación con el número de investigaciones realizadas en el estado de São Paulo y al número de noticias publicadas.

El número de noticias publicadas en el periodo sobre investigaciones realizadas en el mundo es abrumadoramente mayor si lo comparamos con las noticias que abordan el patrimonio arqueológico brasileño, lo cual quizás pueda explicarse por la publicación de noticias procedentes de agencias internacionales de noticias como la Thomson Reuters o Agence France-Presse entre otras. La única excepción se observa en el año 2000 (82 noticias sobre arqueología en Brasil y 48 en el mundo), aunque esta cifra está bastante influenciada por textos relacionados con las celebraciones de los 500 años de Brasil (22), que también puede haber dirigido el interés hacia este tipo de noticias-

Además de eso, cuantitativamente, el número de textos publicados en la Folha de São Paulo no se produce de manera proporcional al gran crecimiento de investigaciones en arqueología realizadas en Brasil - de hecho queda muy atrás. Hay que considerar que el mencionado periódico ya tiene una sección destinada a tales noticias en el cuaderno Ciencia; aún así no existe una regla para la ocupación de ese espacio,. Si el periodista se encontrase constantemente con interesantes sugerencias sobre investigaciones arqueológicas podría ocupar con más frecuencia esa área con noticias sobre arqueología.

En cuanto a la división entre investigaciones académicas y de arqueología preventiva fue posible verificar que en determinados momentos se dan más noticias sobre noticias relacionadas con la concesión de obras y en otros hay más sobre investigaciones académicas. Por otra parte se puede notar una tendencia al crecimiento de las publicaciones sobre investigaciones de arqueología preventiva después de la entrada en vigor de la ordenanza 230 del IPHAN en 2002, sobre todo a partir de 2009.

Podemos especular sobre por qué el número de publicaciones de la Folha de São Paulo no ha crecido proporcionalmente al aumento de las investigaciones hablando tendencialmente. Insistimos en este tendencialmente, puesto que nunca se podrá equiparar el número de noticias con el número de ordenanzas de autorización y permiso emitidas.

Quizá lo que podría ayudar a cambiar este cuadro sea que los arqueólogos de hoy tuvieran el mismo empeño por divulgar sus investigaciones que tuvieron Childe y tantos otros. Por otra parte la situación también puede ser reflejo de la falta de conocimiento de este universo (investigaciones arqueológicas académicas y preventivas o dónde obtener fuentes) por parte de los periodistas, que acaban interesándose siempre por las mismas investigaciones científicas, por ejemplo las realizadas en Lagoa Santa, Serra da Capivara o la Selva Amazónica, o se preocupan sólo de publicar noticias que puedan retratar el carácter antiguo de los grandes descubrimientos.

Notas

¹ Shelley Hales, Joanna Paul. Pompeii in the public imagination, from rediscovery to today. Oxford University Press. Oxford
² Maria Wyke. Projecting the Past. Ancient Rome, Cinema, and History. Routledge. Londres, 1997.
³ Ian Hargreaves. Journalism. Oxford University Press. Oxford, 2005. P.142.
⁴ Jonas Machado, Pedro Paulo Funari. Os Manuscritos do Mar Morto. Annablume e Fapesp. São Paulo, 2012.
⁵ Joan E. Taylor. The Essenes, the Scrolls, and theDead Sea. Oxford University Press. Oxford, 2012. P.257. Pedro Paulo Funari. Arqueología. Ática. São Paulo, 1988.
⁶Pedro Paulo Funari. Arqueología. Ática. São Paulo, 1988.
⁷ Glória Maria V. Tega-­-Calippo. Arqueologia em no]cia: pesquisas impressas, sentidos circulantes e memórias descobertas. Dissertação de Mestrado do Programa de Pós Graduação em divulgação Cien]fica e Cultural da Unicamp, Campinas, 2012.
⁸ Ibid.
⁹ En la jerga periodística brasileña se consideran 'noticias' textos periodísticos que pueden ser de diferentes géneros como noticia, nota y reportaje entre otros. Es decir, se trata de un término genérico usado para cualquier texto producido para un periódico (FOLHA, 2010, p. 82).
¹⁰ En la jerga periodística brasileña se consideran 'noticias' textos periodísticos que pueden ser de diferentes géneros como noticia, nota y reportaje entre otros. Es decir, se trata de un término genérico usado para cualquier texto producido para un periódico (FOLHA, 2010, p. 82).
¹¹ IPHAN. Centro Nacional de Arqueologia. Disponívelem: <http:/tiportal.iphan.gov.brtiportal/montarPaginaSecao.do?id=15506&retorno=paginaIphan>. Acessoem: 17 jul. 2011.
¹² Datos actualizados amablemente obtenidos de Paulo Eduardo Zanettini y de Camila Moraes en 2014.
¹³ Pedro Paulo Funari. Arqueología... Op. Cit.P.15.
¹⁴ Datos obtenidos de la Asociación nacional de Periódicos. Disponibles en http://www.anj.org.br/a-industria-jornalistica/jornais-no-brasil/maiores-jornais-do-brasil. Consultado el 05-04-2011.
¹⁵ Luis Henrique Amorin, Luisa Massarani. Jornalismo Científico: Um estudo de caso de tré sjornais brasileiros. In Revista Brasileira de Ensino de Ciència e Tecnologia. Vol 1, n.1, jan - abril 2008. Curitiba, 2008. P.80.
¹⁶ Las fuentes son lugares o personas que el periodista busca para obtener informaciones y construir su texto. En el caso de las personas, son aquellas que generalmente el periodista acostumbrado a cubrir un tema determinado, en este caso ciencia, suele buscar para saber si existe algún dato relevante, susceptible de convertirse en noticia. En este caso se da una relación más estrecha entre periodista y fuente.
¹⁷ Folha de São Paulo. Manual da Redagao da Folha de Sao Paulo. Publifolha. São Paulo, 2010. P.38.
¹⁸ Brasil tiene 26 estados divididos por región : Midwest: Goiás (GO), Mato Grosso (MT), Mato Grosso do Sul (MS); Nordeste: Maranhão (MA), Piauí (PI), Ceará (CE), Rio Grande do Norte (RN), Paraíba (PB), Pernambuco (PE), Alagoas (AL), Sergipe (SE) e Bahia (BA); Norte: Rondônia (RR), Acre (AC), Amapá (AP), Amazonas (AM), Pará (PA), Rondónia (RO) e Tocantins (TO); Sudeste: Espirito Santo (ES), Minas Gerais (MG), SãoPaulo (SP) e Rio de Janeiro (RJ); Sul: Santa Catarina (SC), Paraná (PA) e Rio Grande do Sul (RS).
¹⁹ Glòria Maria V. Tega-Calippo. Arqueologia em... Op. Cit.
²⁰ Camila Azevedo de Moraes Wichers. Museus e antropofagia do patrimònio arqueológico: caminhos da prática brasileira. 2010. Tese (Doutorado em Museologia) - Departamento de Museologia. Universidade Lusófona de Humanidades e Tecnologias. Lisboa, 2010.
²¹ Ibid. P.202.
²² Folha de S. Paulo. Manual... Op. Cit.P.44.

Bibliografía

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